Inicialmente los caminos de ronda tuvieron una doble funcionalidad: proporcionar una vía de transporte rápido para los pescadores que se debían trasladar de una cala a otra y, por otra parte, crear unos caminos de vigilancia nocturna que permitiesen a las autoridades controlar el contrabando marítimo. En la medida en que ambas actividades han ido desapareciendo de nuestro modo de vida, los caminos de ronda han ido perdiendo su utilidad original, sin embargo, actualmente muchos de ellos se encuentra acondicionados y protegidos de la propiedad privada para que los visitantes puedan conocer nuestro litoral de una manera sencilla.
Probablemente el camino de ronda de S’Agaró sea el más elegante de cuantos posee la Costa Brava, dado que transcurre bordeando una de las primeras y más lujosas urbanizaciones de toda la zona (diseñada por Josep Ensesa i Gubert,), y que da nombre al camino de ronda (entre la «Platja Sant Pol» y la «Platja Sa Conca».).
Para llegar a S´Agaró, cogemos la autopista AP-7 hacia Girona, tomamos la salida 9 haca S:Feliu de Guixols/Lloret y nos incorporamos a la C-35. Seguimos por la C-31 y tomamos la salida 312 hacia la carretera GIV-6621, dirección Sant Feliu de Guixols Nord/S´Agaró. En seguida encontraremos las señales indicativas hacia la «Platja Sant Pol».
Este tramo de Camino de Ronda sólo tiene 2km (sólo ida), pero son suficientes para relajar la mente y el cuerpo admirando la costa.
¿Empezamos?
A lo largo de todo el camino iremos disfrutando de las maravillosas vistas y carteles explicativos con los nombres de las distintas calas que vamos encontrando. Igual que el famoso mirador de «Punta Sant Pau»
Un poco más adelante ya llegamos al final de tan magnífico camino…la «Platja Sa Conca».
Esta playa es de arena gruesa y el mar aquí tiene gran cantidad de sal, pero la tranquilidad es inmejorable.
Descansamos, disfrutamos del paisaje, un baño… y media vuelta.
Cuando llegamos al punto de inicio de nuestra aventura de hoy, los niños quieren volverse a bañar, ¡como no!.. Nos sorprende que a sólo 2 km de la «Platja Sa Conca» , aquí en la «Platja de Sant Pol», la arena es finísima, el agua del mar tiene menos sal, y los niños disfrutan porque caminan y caminan y como dicen ellos…¡no cubre!.
Después de bañarnos y jugar otra vez… acabamos la aventura de hoy…¡aunque a los peques les cuesta irse!
