¿TINEA PEDIS?…si, eso, PIE DE ATLETA
El pie de atleta es una infección de la piel causada por hongos. Las infecciones micóticas (hongos) pueden ocurrir en cualquier parte del cuerpo; en el pie se les denomina pie de atleta, o tiña podal o de los pies.
El pie de atleta tiene especial incidencia entre runners y deportistas de toda índole, de ahí precisamente su nombre. “Es un tipo de hongo que prolifera en condiciones de calor y humedad. Una persona que utilice un calzado tanto deportivo como de calle muy cerrado, elaborado con materiales poco o escasamente transpirables y que tenga tendencia a padecer de sudoración excesiva del pie, tendrá mayor probabilidad a sufrirlo.
El pie de atleta habitualmente da lugar a escozor, sequedad y descamación de la piel. Normalmente aparece en las plantas y entre los dedos de los pies. aunque puede propagarse a otras áreas incluyendo las uñas de los pies.
LAS TRES FASES DEL PIE DE ATLETA:
La Tinea pedis, tiña del pie o pie de atleta es una infección fúngica del pie causada principalmente por dermatofitos. Se puede sobreinfectar con Cándidas y bacterias.
En la 1ª fase de la enfermedad, en la que los síntomas son leves (picor ocasional, pequeñas grietas y descamación), el 85% de los hongos infectantes son dermatofitos.
Pero a medida que la infección avanza y se complica, se puede sobreinfectar por especies del género Candida y por bacterias. En estas fases, los síntomas se hacen más evidentes y es cuando muchos de los pacientes empiezan a tratarse.
TRATAMIENTO:
Suele ser habitualmente de aplicación tópica a base de pomadas y/o polvos antimicóticos. Funcionan muy bien las cremas con bifonazol, en adultos y niños mayores de 12 años.
El bifonazol posee las siguientes características:
- Antifúngico, perteneciente al grupo de los imidazoles, de amplio espectro con actividad contra dermatofitos, levaduras como Candida albicans y otros hongos implicados en el pie de atleta.
- Disminuye el enrojecimiento cutáneo.
- Sólo necesita aplicarse 1 vez al día, lo cual ayuda a cumplir el tratamiento. El tratamiento debe hacerse durante 3 semanas.
Aunque estos hongos son muy resistentes y es muy posible una reinfección.
PREVENCIÓN:
Aunque el pie de atleta no le impide a un runner seguir corriendo ni le afecta en su marcha o ritmo de carrera, sí es cierto que puede ser incómodo por el picor o ardor que puede experimentar. Para prevenir su aparición se recomienda:
– Evitar dejar los pies húmedos o mojados tras la ducha. Para ello hay que secar correctamente toda la zona interdigital con una toalla, trozo de papel o incluso utilizando un secador. En el caso de que se padezca de pie de atleta, el secado nunca se hará mediante fricción o frotamiento sino por contacto para evitar que la piel se rompa.
– Escoger el calcetín adecuado. Se recomienda utilizar aquellos que estén elaborados con fibras naturales como el algodón, lana, etc. Si hay tendencia a una sudoración excesiva, se aconseja ir cambiándolos varias veces al día.
– Utilizar zapatillas o zapatos con materiales transpirables y naturales como la piel o el cuero y evitar al máximo el calzado con un revestimiento excesivamente plástico.
– Mantener el pie ventilado el máximo tiempo que se pueda tanto si se sufre de pie de atleta como si no. Si está ventilado, estará seco, no tendrá humedad y evitará la aparición de este hongo.
– De cara al verano, se recomienda extremar las precauciones y sobre todo utilizar calzado abierto, tipo sandalia, siempre que se pueda.
El evitar caminar descalzo junto con una buena higiene de los pies puede ayudar a reducir la propagación del hongo. Los pies se deben secar muy bien, incluyendo entre los dedos del pie.
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