DEPORTE EN LA MENOPAUSIA

La menopausia es una de las etapas físicas más importantes durante la vida de la mujer. Además de representar un momento clave psicológicamente, también lo es en gran medida físicamente, ya que la salud de la mujer se ve afectada y sufre algunos cambios.

Algunos de los síntomas de la menopausia (dolores de cabeza, insomnio, aumento de peso o dificultades de concentración) se ven mejorados por la práctica habitual de actividades físicas especialmente de tipo aeróbico.

Hacer ejercicio durante la menopausia conlleva los siguientes beneficios:

Mantener un peso adecuado:

Durante la menopausia se gana peso porque se acumula grasa y se produce un cambio en la distribución de la misma, que se fija especialmente en la zona abdominal.

Caminar a paso rápido durante 30 minutos diarios puede ser suficiente para mantener el peso ideal .No hay que olvidar que la obesidad es un factor de riesgo para numerosas enfermedades, como la diabetes mellitus.

Frenar la osteoporosis:

La pérdida de masa ósea, que se inicia en la tercera década de la vida, se acentúa durante la menopausia, debido a la reducción del número de estrógenos. Para disminuir esta pérdida caminar también resulta positivo, porque aumenta la masa ósea y reduce el riesgo de fracturas. Los ejercicios de resistencia, como levantar pesas, las máquinas de remo, y estirar bandas elásticas, contribuyen al incremento de masa muscular y favorecen también la salud de los huesos.

Favorece el sistema cardiovascular:

Al realizar ejercicio mejora la circulación de la sangre y el retorno venoso, se reduce la tensión arterial, y se incrementan los niveles de colesterol HDL (bueno), al tiempo que se reduce el nivel de colesterol LDL (malo). Todo esto incide en un menor riesgo de desarrollar enfermedades cardiovasculares, como ictus o infarto de miocardio.

Mejora la capacidad pulmonar:

Al aumentar la capacidad pulmonar, los órganos del cuerpo reciben mayor oxigenación y sus funciones se optimizan. Practicar ejercicio, junto a una hidratación adecuada, mejora el aspecto de la piel. También facilita la movilidad intestinal y reduce la resistencia a la insulina, lo que supone un mejor control de la diabetes mellitus.

Influye positivamente sobre el estado de ánimo:

Con la actividad física se liberan endorfinas, hormonas que segrega el cerebro de manera natural, y que producen sensación de alegría y bienestar. De este modo, el deporte ejerce una acción protectora contra la depresión, los trastornos de ansiedad, el estrés, la irritabilidad, la disminución de la libido…

Ayuda a conciliar mejor el sueño:

El insomnio es otra de las molestias asociadas a la menopausia. El ejercicio incrementa la producción de melatonina, una hormona implicada en la regulación de los patrones de sueño-vigilia

Mejora la coordinación y la agilidad:

Una rutina de ejercicios diaria aumenta la capacidad de coordinación, los reflejos y la agilidad, lo que previene las caídas y mejora el rendimiento físico en todos los ámbitos de la vida.

El tipo de deporte o de ejercicio más apropiado para la menopausia debe ser el que se adapte mejor a la edad, características y condiciones físicas de la mujer que lo va a realizar.

Consejos sobre el ejercicio en la menopausia:

  • Realizar siempre precalentamiento  para evitar lesiones.

 

  • Al finalizar la sesión de ejercicio dedicar un tiempo a estiramientos y relajación.
  • Para obtener buenos resultados debe ser constante y practicar ejercicio, aunque solo sea caminar, todos o casi todos los días, durante un mínimo de 20 o 30 minutos.
  • Ejercicios aeróbicos: caminar a ritmo de marcha, correr con intensidad baja o moderada, bailar, montar en bicicleta, nadar, hacer gimnasia de mantenimiento….

  • Ejercicios anaeróbicos: levantar pesas, carreras rápidas de corta duración, hacer abdominales…
  • Ejercicios de fortalecimiento de suelo pélvico para prevenir la incontinencia urinaria, entre otras molestias, ahora que la falta de estrógenos ha provocado cambios importantes en el tono general de tus músculos.
  • Otros ejercicios muy recomendables para las mujeres menopáusicas, que mejoran la flexibilidad y resistencia y ayudan a relajarse son el yoga y el Pilates.

La práctica de ejercicio contribuye a minimizar los efectos físicos y psicológicos que produce la pérdida del ciclo menstrual, alarga la calidad de vida de los huesos y retrasa la aparición de la osteoporosis.

Sin hacer deporte, cada década de vida desde los 20 años se pierde un 1 por ciento de musculatura; a partir de los 50, un uno por ciento cada año, y entre un 1 y un 2’5 % de masa ósea. Los huesos ya no tienen la calidad suficiente para aguantar el peso. Un pequeño golpe se convierte en una fractura de muñeca o del cuerpo de una vértebra, lo que provoca más dolores. ¿Solución? Tonificar el cuerpo, ganar masa muscular y absorber más calcio para mejorar los huesos: y eso se logra con actividad física. 

Y si estos entrenamientos se realizan al aire libre, mucho mejor: el sol aporta la vitamina D, necesaria para que el calcio se absorba y se fije en los huesos.

Ya sabeis lo que decimos siempre…NUNCA ES TARDE PARA EMPEZAR A HACER DEPORTE y SIEMPRE SE OBTIENEN BENEFICIOS.

 Este artículo ha sido elaborado con información extraida de:

  • www.webconsultas.com
  • www.abc.es
  • www.centradaenti.es
  • www.flaviamenopausia.com
  • www.marca.com

 

 

¿POR QUÉ CORREN LAS MUJERES?

El ritmo de vida actual nos absorbe la energía y el tiempo. A veces parece que solo comemos, dormimos y trabajamos y que no hay alternativa posible. Aunque sabemos que deberíamos hacer más deporte y cuidar más de nuestra salud nunca encontramos un “hueco” en nuestras agendas para el gimnasio. La casa, los niños, el trabajo…

Pero ¿por qué cada vez son más las mujeres que se animan a correr?

La respuesta está clara: porque además de los evidentes cambios físicos que se notan, calzarse las zapatillas y salir a correr ayuda a despejar la mente, a dejar de pensar, a respirar hondo y mejorar cada una de las etapas de nuestra vida.

Las mujeres corren por…

  1. Por salud.Cada día hay más mujeres que se preocupan por tener una mejor calidad de vida y está más que claro, que correr la alarga. Los beneficios a nivel cardiovascular están comprobados, además de que se mejorar la salud en general.
  2. Por bajar de peso.Corriendo se consigue bajar de peso de forma constante y sin efecto rebote. Además, con el tiempo, se aprende a comer mejor y cambiar la adicción por la comida por más kilómetros.
  3. Por verse y sentirse mejor.¡El estado de ánimo cambia! La percepción que tenemos de uno mismo se mejora gracias al buen funcionamiento de nuestros neurotransmisores. Las medallas, los nuevos amigos, el ambiente, nuestros logros físicos y mentales, entre otros, colaboran para valorarnos más.
  4. Por dar un buen ejemplo.A varias sus hijos les cuestionaron su sedentarismo y se pusieron las pilas para no solo correr ellas mismas sino invitar al resto de la familia. ¡Felicidades!
  5. Por placer. Así de simple. El contagio social es inevitable y después de correr, se ve la vida de otra forma.
  6. Por libertad.No hay ningún momento que la carrera no sea compañera de nuestra libertad. Puedes correr por algo o para algo, no importa, pero la sensación de poder hacerlo, sobre todo al aire libre, es irrepetible. Para algunas es meditar en movimiento.
  7. Por sentirse poderosas. La mayoría usan la carrera como catarsis y siempre resurgen más fuertes que antes de ser corredoras.
  8. Por ser feliz.Correr es un deporte que reconoce nuestro esfuerzo cuantas veces queramos, es decir, cada medalla o cruce de meta nos recuerda lo mucho que se ha trabajado para conseguirlo.
  9. ¿A qué esperas para empezar a correr?

Mentalidad: disfrutar por encima de todo:

La mujer no busca tanto el éxito deportivo (aunque también ), sino que persigue una mejora personal, un triunfo interno. Piensa sobre todo en cómo se quiere sentir cuando la acabe, más que en el cronómetro.

Aún así, las corredoras cogen velocidad, y reclaman información especializada, sobre todo en lo referente a lesiones y alimentación.

Prevenir lesiones:

Las lesiones no son unisex, no. Las ventajas y los riesgos están bien repartidos por sexos.

Hay que tener en cuenta, por ejemplo, que el corazón es más pequeño -como los pulmones- y que en la sangre hay menos hemoglobina. Por lo tanto, cuesta más oxigenar los músculos y el esfuerzo cardíaco tiene que ser más grande. En contra, las reservas de grasa específica permiten al cuerpo reservar el valioso glucógeno -la pasta que habéis comido el día de antes de una carrera- para los momentos realmente críticos.

A la hora de evitar lesiones, el cuerpo está lleno de señales. La densidad ósea es menor -y, además, se reduce con la menopausia-, cosa que aumenta el riesgo de fractures de estrés, por petición del impacto en un punto del cuerpo. Además, las rodillas sufren por la anatomía de las piernas. Por si fuera poco, la flexibilidad del cuerpo femenino abre las puertas a las lesiones por inestabilidad articular, sobre todo en el tobillo.

Alimentación: agua y minerales:

La base, aquí, es la misma que en el caso de los hombres: una dieta equilibrada y una buena hidratación dan todo lo que hace falta para afrontar los entrenamientos y las carreras con garantías. Un par de ingredientes básicos son el calcio y el hierro. El calcio, porque, como ya hemos dicho, los huesos sufren y hay que cuidarlos. Para evitar el riesgo de osteoporosis -y de lesiones, que es lo que importa aquí- hay que tomar lácteos o, en caso de intolerancia, frutos secos y pescado. El hierro, que ya os hace la puñeta a menudo, es especialmente importante antes de correr, ya que una anemia hará bajar el rendimiento de forma drástica.

Este artículo ha sido elaborado con información extraida de:

  • www.soycorredora.com
  • www.elmundo.es
  • www.timeout.es
  • www.training-planet.com

 

 

CORRER POR SALUD…MENTAL.

Un reciente estudio liderado por el psicólogo deportivo Oliver Martínez junto con los doctores Josep Pla, doctor por la Universitat Autònoma de Barcelona, y Óscar Pino, doctor por la Universitat de Barcelona concluye que el running mejora el rendimiento cognoscitivo y hace posible frenar el declive del funcionamiento cerebral.

El trabajo de investigaciónRunning: Más allá del deporte” deduce que gran parte de los beneficios son debidos al efecto de varios mecanismos neurobiológicos.

Correr es una de las actividades deportivas más recomendadas por médicos y terapeutas, para aquellas personas que buscan no sólo mejorar su apariencia física, sino también su salud emocional.

Tenemos que descubrir nuestra motivación, nadie sale a correr si no tiene una, hay gente que lo hace por salud, otros por aspecto físico o por la sensación de libertad que te da correr, en otros casos porque es su medio de desconexión, tener una motivación inicial es indispensable para iniciarse en la práctica de correr, lo que viene luego es la inmensa cantidad de beneficios que nos aporta y que se empiezan a hacer visibles rápidamente.

Correr es un deporte aeróbico que incide directa y positivamente mente sobre la salud cardiovascular y la capacidad respiratoria: mejora la circulación y el oxígeno llega más y mejor a todos los tejidos del organismo, incluido el cerebro. Y una de las consecuencias es una mayor liberación de endorfinas. Sin embargo, el ejercicio regular permite enseñar al organismo frente al estrés. De hecho, éste percibe el esfuerzo físico como una situación de estrés, pues al realizarlo aumenta la frecuencia cardíaca y se acelera la respiración.

Pero en este caso el estrés dura mientras se corre y en poco tiempo el cuerpo se acostumbra a verse sometido a pequeñas dosis de estrés de duración limitada que sirve para liberar serotonina y, por la acción de este neurotransmisor, la tensión acumulada durante el día y eliminar la ansiedad que ésta pueda haber generado.

De este modo el estrés mental y emocional se combate con pequeñas dosis de estrés físico, mejorando el estado de ánimo. Asimismo, al correr se inicia una suerte de terapia dirigida a mejorar la autoestima, en la medida que se van logrando los objetivos que llevaron a la decisión de practicar ejercicio regularmente y que dan paso a otros nuevos.

Beneficios psicológicos:

  • Aumenta el positivismo y la autoestima de la persona: Los cambios en el aspecto físico se hacen visibles al cabo de poco tiempo, esto ayuda a que la persona empiece a verse más en forma y con ello se produce un aumento de la autoestima. Los beneficios de correr, entre otras cosas, se reflejarán en un nuevo sentimiento de orgullo y respeto por tu cuerpo.
  • Aporta estabilidad emocional y equilibrio: La práctica de correr es una actividad que provoca ilusión y en la mayoría de casos representa un reto, se acaba convirtiendo en un hábito más y esto provoca control.
  • Reduce el estrés y ansiedad: La práctica de correr libera adrenalina y nos distraemos de los problemas, lo cual favorece la reducción del estrés y la ansiedad.
  • Mejora tu estado anímico: Libera serotonina y endorfinas, relacionadas con la mejora del estado de ánimo y sensaciones placenteras.
  • Alivia la depresiónCorrer es un gran aliado en el tratamiento de la depresión clínica. Correr es terapéutico.
  • Mejora las relaciones: Salir a correr en pareja o en grupo fomenta habilidades sociales como la empatía, la comunicación, la motivación, la negociación y la persuasión..
  • Agudiza la concentración y mejora la resistencia mental: esto se debe a que crece el flujo de sangre al cerebro. Correr alivia la fatiga mental, agudiza la memoria, y mejora la resistencia emocional. Los corredores tienen una mejor capacidad para resolver problemas y están más alerta.
  • Ayuda en el control de la ira: Nos relaja, después de cada entreno nos sentimos a gusto, con el entorno y con nosotros mismos. Correr es un tranquilizante natural.
  • Aumenta la sensación de libertad: Correr es una gran manera de sentirse libre de todos los retos y obstáculos que aparecen en la vida. Al correr se genera una increíble sensación interna de libertad. A veces es imprescindible hacer ejercicio para lograr que la mente descanse y desconecte de los problemas, algo difícil de lograr de otro modo en la sociedad moderna

Así que ya sabeis…¡ a que esperáis!

Este artículo ha sido elaborado con información extraída de:

  • www.sanitas.es
  • www.salud180.es
  • www.omicrono.elespanol.com
  • www.tusbuenosmomentos.com
  • www.tratamientoparatuansiedad.com

NO ME GUSTA CORRER

Si sois de los que no os gusta correr…hoy intentaremos haceros cambiar de idea. Empezamos con un video:

¿Aún no os hemos convencido?

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¿Necesitais argumentos, motivación y alguna norma para no ser derrotado por la pereza?

Salir a correr en otoño puede ser tan gratificante como en primavera y, por supuesto, tu figura y tu forma física te lo agradecerán.

Aquí os dejamos unos buenos consejos para no abandonar a la primera:

  • Intenta aprovechar las horas de luz. Las noches son más largas y si esperamos a que se ponga el sol, la temperatura será más baja y tendremos menos ganas de salir a correr. El problema, el de siempre, que las horas de día coinciden normalmente con nuestro horario laboral pero, siempre que sea posible, el sol invita a salir a correr, sobre todo si el clima acompaña. Justo después de que llueva es un momento ideal para practicar deporte al aire libre si tienes alergia, ya que la mayor parte de polen en el ambiente se habrá limpiado.
  • Corre más de uno o dos días por semana. Cuando lo tomes como una rutina, el día que no lo hagas te faltará algo. Lo echarás de menos y harás lo posible y lo imposible por conseguir tu rato contigo mismo corriendo por la ciudad, por un parque o por el campo. Cambia los recorridos de los entrenamientos, cambia las rutinas, no hagas siempre lo mismo ni en el mismo lugar.

  • Calentamiento obligatorio. Antes de empezar a correr conviene calentar un poco hasta que el cuerpo se vaya habituando al ejercicio, para después empezar a trotar e ir aumentando la intensidad progresivamente.

  • Abrígate con prendas transpirables. El algodón está prohibido ya que se empapa y estaremos en contacto con el sudor. Recuerda, además, que todo el tejido que se quede pegado a tu cuerpo se puede enfriar una vez que hayas terminado de correr y existe el peligro de que cojas un resfriado.

  • Hazte visible. Si sales a correr de noche, sea a  las últimas horas del día o por la mañana muy temprano, utiliza prendas y elementos refractantes por seguridad.

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  • Dúchate o cámbiate rápidamente una vez que hayas terminado de correr para evitar quedarte frío.

  • Intenta no salir a correr solo, puesto que si es así tienes más posibilidades de ser derrotado por la pereza. Si quedas con alguien, en cierta medida, te sientes obligado a moverte por no quedar mal. Existen grupos de corredores que se encuentran para entrenar juntos, o puedes buscar gente muy similar a tí y empezar juntos en esto del running. 

  • Márcate unos objetivos. Ésta es la mejor forma de motivarte. Hay dos maneras: correr más distancia o mejorar tu marca. Retándote a ti mismo lograrás estar con ganas por mucho que llueva o haga frío. Busca objetivos a corto, medio y largo plazo: competiciones, metas, retos que te motiven y te empujen a entrenar con ganas. Ponte objetivos realistas. Ni pasarnos ni quedarnos cortos, han de ser objetivos que sean alcanzables pero que nos motive realizarlos.  Para esto es muy importante el uso de aplicaciones móviles especializadas.

  • La motivación, en tus oídos. Otra arma para sentirse motivado es ir escuchando música o la radio. Está comprobado que funciona. Además, puedes matar dos pájaros de un tiro ya que vas informándote o aprendiendo cosas a la vez que estás haciendo deporte.

Estamos seguros de que el que lo prueba…se engancha. Tenemos muchos testimonios de running.

A ver cuantos de vosotros acabareis diciendo…

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EJERCICIO FÍSICO Y CÁNCER

Muchos estudios  demuestran que la realización diaria de ejercicio físico mejora la salud y la calidad de vida de las personas tratadas por cáncer, ya que permite reducir el cansancio, incrementar la fuerza muscular y además tienen efectos psicológicos positivos por que disminuye la ansiedad y la depresión.

 

La actividad física de baja intensidad como el caminar, hacer Tai Chi, yoga o dar paseos en bicicleta (terreno llano), mejoran sustancialmente la calidad de vida de los pacientes durante el tratamiento.

Relación entre sedentarismo y cáncer:

En el año 1922 se escribió el primer artículo científico en el que se ligaba la práctica del ejercicio físico y la prevención del cáncer. Desde entonces se han realizado múltiples estudios que han llegado a las siguientes conclusiones sobre esta relación:

  • El nivel de evidencias científicas sobre el papel de la actividad física como factor de prevención es alto y convincente, en los casos de cáncer de mama y colorrectal.
  • En los casos de cáncer de próstata el nivel de evidencia científica es probable, y en los de pulmón y endometrio tan sólo posible.
  • Los efectos beneficiosos del ejercicio físico en la prevención del cáncer son dependientes de la cantidad total de ejercicio realizado (horas e intensidad). De esta forma, los niveles más elevados de actividad física, medidos en horas practicadas semanalmente, se relacionan con una menor incidencia de ciertos tipos de cáncer (mama, colon y próstata).
  • En los pacientes ya tratados, el mantenimiento de la actividad física reduce el riesgo de recidiva y de mortalidad.

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El ejercicio físico mejora la capacidad funcional, aumenta la fuerza muscular y la flexibilidad, controla el peso, mejora la neutropenia y la trombocitopenia (defensas y plaquetas), aumenta los niveles de hemoglobina (mejora la anemia); mejora el control del dolor, las náuseas y los vómitos; disminuye la fatiga; reduce ansiedad, incrementa la energía, mejora la autoestima, y  da sensación de control.

Contraindicaciones:

Evitar el ejercicio en caso de neutropenia (menos de 500 neutrófilos), anemia con hemoglobina por debajo de 10, leucocitos por debajo de 3.000 y plaquetas por debajo de 50.000. No realizar ejercicio si hay fiebre de más de 38ºC, disnea con el ejercicio, caquexia, dolor óseo, náuseas severas. Evitar la natación e instalaciones deportivas cerradas si hay neutropenia.

Sugerencias que  pueden ayudar a seguir estando activo incluso durante el tratamiento:

  • Habla con el oncólogo sobre la posibilidad de hacer alguna actividad física y sigue sus consejos.
  • Piensa qué tipo de ejercicio te apetece hacer y, si es posible apúntate a un gimnasio o pide a un/a amigo/a o familiar que te acompañe. En este momento el apoyo social es importante y te puede ayudar a cumplir con tu propósito.
  • Planifica tu tiempo y fija una hora para hacer la actividad física que hayas elegido.
  • El día que recibes tratamiento y los días posteriores o si te encuentras más cansado, reduce la actividad tanto en intensidad como en tiempo. En ese caso sería suficiente 5 o 10 minutos al día (aunque estés cansado el ejercicio puede ayudarte a controlar síntomas).
  • Evita hacer ejercicio que te deje extenuado, el propósito no es entrenarse para una competición, sino obtener los beneficios de una vida activa y, con 30 minutos diarios es suficiente.

Si nunca has hecho nada de ejercicio y ahora quieres comenzar a llevar un estilo de vida más saludable puedes seguir estas recomendaciones:

  • Lo más recomendable para empezar a ser activo es caminar. Andar a ritmo rápido es el mejor deporte que puede hacer una persona que parte de una situación de sedentarismo. También es una buena actividad el Yoga.
  • Las primeras semanas dedica al menos 30 minutos diarios a caminar.
  • Según vayas adquiriendo forma física puedes ir incorporando otro tipo de deporte o ejercicios. Para ello debes tener en cuenta qué actividad te gusta más y comenzar gradualmente con ella.

Si después de los tratamientos has mantenido una vida progresivamente más activa y ya estás caminando diariamente 30 minutos, entonces ya estás preparado para dar un paso más.

Elije el deporte o actividad que más te guste (natación, bicicleta, baile…) y comienza lentamente a hacerlo.

Cada semana incrementa 5 minutos el tiempo para hacer deporte y si te cansas mucho, vuelve a dedicarle el mismo tiempo que la semana anterior. Si no puedes hacer más de 30 minutos, no te preocupes, es suficiente para estar en forma.

Busca compañía que te resulte agradable para compartir ese momento.

Acuérdate de beber líquidos en abundancia para prevenir la deshidratación, sobretodo en verano.

Efectos beneficiosos del deporte en el cáncer demostrados científicamente:

Mantiene y Mejora Disminuye
Fuerza y masa muscular Síntomas/ efectos secundarios del cáncer
Función cardiovascular Intensidad de los síntomas
Capacidad inmune Astenia y mala tolerancia a tratamiento
Posibilidad de movilidad Estrés psicológico y emocional
Capacidad física Duración del ingreso hospitalario
Autoestima / autoimagen Depresión y ansiedad

Siempre será mejor hacer algo de ejercicio que llevar una vida totalmente sedentaria.

Este artículo ha sido elaborado con información extraida de:

www.aecc.es

www.econoticias.com

www.madrid.org

POWER WALKING

Power Walking…o lo que es lo mismo…caminar a buen ritmo para mantenerte activo.

¿Qué es  el Power Walking?

El Power Walking es una actividad que consiste en caminar de forma enérgica y a un ritmo muy vivo, de aproximadamente 7 kilómetros por hora, durante un período de tiempo superior a los 45 minutos.

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El Power Walking es una actividad adecuada para todo tipo de personas, de cualquier edad y de toda condición física. Si somos principiantes podemos comenzar caminando menos tiempo e ir aumentando nuestra caminata de forma progresiva a la vez que vamos mejorando nuestro fondo. También es una actividad muy adecuada para que la realicen los deportistas en sus días de descanso activo: si eres de los que no puede pasar ni un día sin ejercitarse, el Power Walking es una buena manera de reducir la intensidad y propiciar la recuperación activa.

A diferencia del running, no se sufre tanto impacto articular. El desgaste sobre las articulaciones resulta mucho menor que corriendo debido a que apenas se despegan los pies del suelo.

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No sólo con el running la postura es importante…

Con esta modalidad de caminar a ritmo rápido se consiguen movilizar casi todos los grupos musculares del cuerpo, desde los brazos pasando por el abdomen y piernas. Pero, como en todas las disciplinas de deporte, la postura es esencial para su correcta ejecución y prevención de lesiones. Así, deberemos poner especial cuidado para que el tronco permanezca erguido. Esto nos permitirá mantener el equilibrio sin necesidad de que la musculatura lumbar se vea afectada. Además, es importante mirar al frente para evitar las sobrecargas cervicales, el pecho arriba y los hombros atrás y abajo y el abdomen contraído para proteger la zona lumbar.

De esta manera nos aseguraremos de llevar una buena postura que minimizará el dolor de espalda que muchos runners sufren cuando salen a correr.

No debemos olvidar tampoco coordinar el movimiento de nuestras piernas con el de nuestros brazos, que nos ayudarán a impulsarnos en los momentos de mayor velocidad de la caminata. Debe ser un movimiento natural, no forzado, en el que los brazos se balancean a ambos lados del cuerpo mientras mantenemos los codos ligeramente doblados.

Para aquellos que se inicien en el Power Walking, es aconsejable comenzar con sesiones de veinte minutos tres veces por semana a un ritmo poco intenso para posteriormente ir aumentando el ritmo.

Si queremos aumentar la intensidad del ejercicio podemos elegir un recorrido con cuestas, o ir aumentando la velocidad de la caminata de forma progresiva. De esta manera podemos pasar de un entrenamiento suave a otro un poco más intenso, y podemos ir mejorando nuestra condición física.

 Beneficios del Power Walking:… pues muy parecidos a los beneficios del running (clica aquí  y te lo explicamos):

  • Se trata de una actividad física moderada que puede mantener la frecuencia cardíaca al 70 por ciento de su máximo, lo que ayudaría a quemar grasas y tener una silueta de envidia.
  • Mejora el sistema respiratorio y el sistema cardiovascular.
  • Regula la presión arterial, por lo que reduce el riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares.
  • Como no es una actividad dura, las articulaciones sufren poco, dado que siempre hay un pie que está en contacto con el suelo.
  • Fortalece el tren inferior, en especial, los glúteos, los cuádriceps, los gemelos y, también, el abdomen.
  • El Power Walking libera diversas hormonas que repercuten de manera positiva en nuestro estado de ánimo. Una es la dopamina y otra la serotonina, quienes se encargan de conseguir la sensación de adicción al deporte, disminuir el estrés, regular la motivación, mejorar nuestro estado anímico y superar el insomnio.

Este artículo ha sido elaborado con información extraida de:

  • www.sanitas.es
  • www.nutrimedic.com
  • www.sportadictos.com

 

ALIMENTACIÓN OPTIMISTA

Cuando llega el invierno muchas veces sufrimos la falta de luz y nuestro estado de ánimo no es el mismo que en verano.

Cuando los días son más cortos aumentan los niveles de melatonina y disminuyen los de serotonina. Esto produce a menudo un bajo estado de ánimo.  Si cuidamos nuestro menú diario ganaremos autoestima y si además procuramos incorporar alimentos que inducen a producir serotonina,nuestro optimismo crecerá.

Tanto lo que comemos como lo que dejamos de comer tiene una conexión directa con nuestro estado de ánimo. Necesitamos alimentos ricos en carotenoides, anitoxidantes y sobre todo en carbohidratos ricos en fibra para subirnos la moral: manzanas, almendras, moniatos, calabaza, cebada, nueces, brócoli, lácteos.

Las personas optimistas posiblemente estén realizando una alimentación correcta, equilibrada y saludable, mientras que los que lo ven siempre todo negro tal vez tengan graves carencias alimenticias.

El estado anímico tiene mucho que ver con el tipo de alimentos que se eligen, dado que éstos producen distintos efectos sobre el azúcar en sangre.

  • El ánimo decae cuando la concentración de azúcar desciende.
  • La moral crece o sube por los cielos cuando la concentración es alta.

A través de distintos estudios e investigaciones se ha podido constatar que alimentos muy ricos en carbohidratos, como son los dulces y el chocolate, son estupendos para alegrar el espíritu, aplacar los nervios y aumentar la somnolencia. El motivo se debe a que cuando ingerimos alimentos ricos en hidratos de carbono y pobres en proteínas, la insulina que se desprende de ellos hace que aumente la presencia en el encéfalo de un neurotransmisor calmante la serotonina. Dulces y chocolates de todo tipo estarían dentro de lo que podríamos llamar alimentación “reconfortante”. De forma ocasional, y sabiendo el efecto que producen en nuestro organismo, podríamos echar mano de ellos con moderación para no caer en otro problema: el sobrepeso.

La serotonina es una sustancia que produce felicidad y bienestar que nuestro organismo produce por sí mismo, pero que podemos potenciar a través de las comidas que ingerimos para lograr mayores niveles de confort, sobre todo en situaciones bajas.

Para liberarla es esencial el triptófano, un aminoácido que estimula su producción y que nuestro cuerpo no produce, por lo que es recomendable aportarlo a través de productos que contienen altos niveles de este componente.

El queso, la carne magra, el pescado, las legumbres y las nueces son alimentos ideales para nuestro propósito, así como otros productos de origen vegetal como la alfalfa, el brócoli, la coliflor, las endibias, las zanahorias, el apio, las espinacas y los berros. Todos ellos incrementan el nivel de triptófano en nuestra corriente sanguínea que, a su vez, incide directamente en la serotonina ayudándola a liberarse. Las consecuencias son alegría, agilidad mental y entusiasmo, es decir, optimismo.

¡Arriba ese ánimo!

Nuestra alimentación afecta a nuestro estado de ánimo. Veamos cómo:

  • Estados depresivos: pueden estar causados por una carencia de hierro. Las fuentes principales de este mineral son : hígado, morcilla, riñones, caza (pichón, venado, perdiz, jabalí…), berberechos, mejillones, pescado azul (en especial la sardina), albaricoques secos, ciruelas pasas, verduras de hoja ancha, legumbre y tofu.
  • Altibajos: si entre las comidas principales pasan demasiadas horas se producen bajones o cambios bruscos de humor. En ese caso, lo que debemos hacer es estabilizar la concentración de azúcar en la sangre: en lugar de hacer sólo 3 comidas copiosas es mucho mejor repartir los alimentos en cinco o seis ingestas, más ligeras que las anteriores. Lo ideal es tomar un piscolabis a media mañana y otro a media tarde.
  • Decaimiento y cansancio: posiblemente se deban a la escasez de fibra soluble en la dieta. Es aconsejable consumir carbohidratos sin refinar, en especial legumbres, frutas y verduras. Dentro de las frutas, el plátano nos obsequia con serotonina y es una forma mucho más sana y ligera de levantar el ánimo que recurrir a la repostería, a los pasteles y dulces con exceso de azúcar, que además son ricos en colesterol (en especial los industriales).
  • Tensión y nervios: las situaciones críticas pueden afectar a la absorción de nutrientes, por tanto en estos periodos conviene incrementar la ingesta de hígado, verduras, marisco, pescado azul y germen de trigo.

La despensa del buen humor: Vitaminas y minerales que nos suben el ánimo:

El estrés, el cansancio influyen también en nuestro estado de ánimo… Para sentirnos como nuevos en nuestra dieta no pueden faltarnos vitaminas y minerales imprescindibles. Veamos cuales:

Vitamina B1: considerada antidepresiva. Se la conoce también como Tiamina y la encontramos en legumbres, soja, cereales, frutos secos, yema de huevo, leche y patatas. Interviene en la transmisión del flujo nervioso y ayuda a ser más vitalistas.

Vitamina B6: otra buena aliada del buen humor. También llamada Piridoxina, su principal fuente son los pescados, la carne, verduras, garbanzos, lentejas, levadura de cerveza, germen de trigo, avena, hígado y plátanos. Actúa junto a la vitamina B1 formando un frente común de superación frente al estrés. Su déficit puede causarnos ansiedad y tensión nerviosa. Ayuda a aliviar la irritación y tristeza que muchas mujeres sienten antes de la menstruación (en el síndrome premenstrual). Participa en el metabolismo del estrógeno en el hígado, por ese motivo ejerce un efecto indirecto sobre el estado de ánimo.

Vitamina B12: evita los cambios de ánimo. Sus fuentes son en su mayoría de origen animal, por lo que los vegetarianos pueden sufrir su deficiencia y necesitar tomar leche de soja, extracto de levadura y cereales enriquecidos con esta vitamina. La encontramos en carnes, pescados (atún, arenque, sardinas…), leche y quesos.

Magnesio: esencial para el buen funcionamiento de casi un centenar de enzimas, dos de esta (la cocarboxilasa y la coenzima A) colaboran en la obtención de la energía de los alimentos. Este mineral también es esencial en el desarrollo de los huesos, la regulación de la tensión sanguínea y la actividad cerebral. Su fuente esencial son los cereales integrales, nueces, aguacates, legumbres y verduras de hoja verde, como por ejemplo la acelga o la espinaca. Los desequilibrios emocionales, la ansiedad y los nervios favorecen su déficit, lo que también se traduce en una falta de energía.

Cinc: esencial para mantener en buen estado el sistema inmunológico, para tener un crecimiento normal y una correcta formación de tejidos. Lo encontramos en las ostras y mariscos en general, en la carne magra, pipas de calabaza, leche, queso curado, yogur, frutos secos, pipas de girasol, alubias y pan integral. Investigaciones recientes han demostrado sus efectos frente a los resfriados.

Dieta básica del buen humor:

Desayuno: Olvida el café bebido sin más, para salir pitando a trabajar. Para empezar el día con buen pié, debes incluir en tu desayuno:

  • 1 taza de leche descremada o un derivado lácteo como el yogur, rico en calcio y que ayuda a regular el sistema nervioso.
  • 1 zumo de naranja natural, fuente de vitamina C, que refuerza las defensas y además actúa como estimulante mental.
  • Cereales que nos aportan fibra y energía.

Media mañana: Es básico tomar algo para evitar bajones de ánimo y de rendimiento. Un buen tentempié y muy saludable es:

  • queso fresco, yogur descremado o una pieza de fruta (manzana, pera, naranja…).

Comida y cena: Debemos incluir proteínas, en poca cantidad (100 gr son suficientes) y verduras e hidratos de carbono, que son nuestro mejor combustible:

  • ensaladas de temporada, carbohidratos (pasta, arroz, patatas…), 100 gr de carne o pescado preparados con las técnicas menos calóricas (al vapor, a la plancha, cocidos….

Debemos rechazar las grasas y guarniciones más calóricas.

Media tarde:

  • Igual que a media mañana.

Resumiendo…

Reducir las grasas y la ingesta de sal, tener un desayuno completo, beber agua y optar por la fibra, comer legumbres, arroz, pasta y cinco piezas de fruta al día y consumir más pescado son determinantes para mantener unos altos niveles de bienestar, tan relacionado con nuestras costumbres alimentarias.

Estos niveles se incrementarán si además acompañamos estas prácticas con una vida activa día a día y un poco de ejercicio para mantenernos saludables y felices en nuestro entorno.

Este artículo ha sido elaborado a partir de información extraída de:

www.nutriguia.com

www.guiagastronomika.diariovasco.com

 

EL RUNNING COMO ANTIDEPRESIVO

Todos somos conscientes de como va la vida actualmente. Seguro que muchos de nosotros conocemos a alguien que incluso está al borde de la desesperación porque no le ve un final a su triste situación. Hoy, vamos a contaros una historia que nos ha gustado mucho, Une farmacia y running.  Quizás alguno de vosotros ya la conozcais. Vamos a contaros …

La historia de Rob Krar

Rob Krar ha pasado de ser farmacéutico a consagrarse como uno de los mejores ultrarunners a nivel mundial.

En el año 2012 se encontraba sumido en una profunda depresión y  decidió combatir esta dura y larga enfermedad mental a base de correr millas por montañas y terrenos escarpados, algunos con desniveles tan pronunciados como el del Cañon del Colorado, en el norte de Arizona.

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La historia de Rob Krar llegó a oídos del director de cine Joel Wolpert, especializado en filmaciones desarrolladas en entornos naturales y producciones de trailrunning y capaz de hacer lo que sea para conseguir la mejor toma o el plano perfecto. El resultado de todo esto ha sido un pequeño documental de 8 minutos de duración titulado: ‘Depressions: A Few Moments From 30 Miles in the Canyon’ (Depresiones: unos pocos momentos a lo largo de 30 millas en el Cañon del Colorado).

Durante esos ocho minutos en lo que pega un sol de justicia y hace un calor insoportable en el Gran Cañon, podemos ver a este peculiar trail runner de barba tupida descender y subir a un ritmo frenético por la escarpada garganta excavada por el río Colorado.

Este corto pero intenso y humano documental combina unas espectaculares imágenes de Krar corriendo junto a las reflexiones del protagonista acerca de su lucha contra esta terrible enfermedad como es la depresión y que padecen millones de personas en el mundo. El ultra runner, que recientemente se ha unido al equipo de atletas de The North Face, marcó el mejor tiempo registrado hasta el momento cruzando el Gran Cañón de norte a sur en 2 horas y 51 minutos.

Rob Krar reflexiona a lo largo de las 30 millas de recorrido, Cuenta su pasión por el trail running y sus pensamientos sobre la vida, la lucha contra uno mismo y la pelea constante por seguir adelante.

Krar afirma que existe bastante similitud entre una carrera de larga distancia y una enfermedad mental como la depresión, ya que en ambas existen ciertos tintes de oscuridad que te hacen sentirte triste y enfadado con uno mismo durante mucho tiempo.

La historia del corredor de montaña Rob Krar viene a corroborar lo que han demostrado varios estudios científicos que aseguran que el deporte es un aliado perfecto para combatir ciertas enfermedades, entre las que se incluye la depresión. El ejercicio físico tiene unos efectos similares a los antidepresivos, pero con el valor añadido que conlleva el deporte y la reducción notable que supone en cuanto a medicación.

Hacer deporte beneficia a tu cerebro

La explicación científica de la historia de Krar y, la de otros casos similares, es que cuando alguien en un estado depresivo realiza deporte aumenta su concentración de serotonina -un neurotransmisor que incrementa la sensación de felicidad y bienestar- en el organismo de forma natural, logrando un efecto o reacción similar a la que producen los antidepresivos pero con la diferencia que éstos lo hacen por medio de una sustancia química.

Tu cuerpo, durante la práctica del running, segrega unas sustancias químicas llamadas endorfinas, que se conocen como la hormona de la felicidad, ya que transmite a tu cerebro una sensación de bienestar general y de tranquilidad que te permite evadirte de tu depresión.

Otra ventaja del running es que es muy sencillo establecerte metas y notar tus progresos. Esto te ayuda a tener un estímulo que te incite a salir a la calle a practicar running. Te recomiendo que lleves un control de los tiempos y distancias que vas haciendo para que tú mismo puedas ver tus progresos diarios.

A medida que vayas dedicándole más tiempo, irás notando como cada día te sientes mejor y tienes más ganas de seguir corriendo. Eso te permitirá tener la mente distraída mientras estés haciendo running y, con un poco de tiempo, podrás recuperarte y ver el mundo de manera positiva.

Si últimamente notas que no te sientes bien contigo mismo y que ves todo negro, ¡prueba el running! Verás como pronto ves las cosas de otra manera y, además, puedes conocer gente nueva que también sea aficionada al running y juntos podéis compartir este rato practicando deporte.

Os recomendamos que leais a nuestros TESTIMONIOS DE RUNNING.