HIDRATACIÓN

Con estos calores que aún tenemos creemos imprescindible volver a hablar de la importancia de una correcta hidratación.

Por este motivo compartimos un breve resumen del Consejo General de Colegios Oficiales de Farmacéuticos.

El agua y los electrolitos constituyen el medio esencial para el desarrollo de la vida. Los cambios climáticos y los nuevos estilos de vida están condicionando cambios en los hábitos de ingesta de bebidas, habiéndose generalizado el consumo de nuevas bebidas utilizadas, como las que contienen sales minerales, entre otras razones, para afrontar la actividad física diaria. Todo ello hace conveniente revisar la importancia de una hidratación adecuada para una vida activa y saludable.
Las bebidas con un contenido determinado de azúcares y de sales minerales, correctamente utilizadas, pueden ser una importante ayuda para mejorar la rehidratación y prevenir la deshidratación o solucionar los procesos leves de deshidratación. Los criterios preventivos que se
exponen a continuación pretenden mejorar la calidad de vida y la salud de la población general, ayudando a mantener el equilibrio hídrico y evitando la aparición de síntomas relativos a los procesos de deshidratación.

Decálogo de la hidratación:

1. Se recomienda consumir entre 2 y 2,5 litros de líquidos al día, a lo largo del día, incluyendo el agua que proviene de los alimentos. La sed es una señal que nos avisa que hay que beber líquidos. No es saludable “aguantar” sin beber, al contrario, se debe beber sin esperar a tener sed. Si se realiza actividad física en ambientes calurosos es necesario aumentar la cantidad de líquido.

2. Hay que prestar atención muy especial a las situaciones que pueden favorecer la deshidratación, como el calor y la sequedad ambiental anormalmente elevados, fiebre, diarreas, vómitos, etc. Se desaconseja realizar actividades físicas en las horas centrales de días calurosos, usando excesivas prendas de abrigo, exposición prolongada al sol.

3. Los síntomas que orientan hacia un cuadro de deshidratación son, entre otros, sed, sequedad de las mucosas y de la piel, disminución de la cantidad de orina y, en casos más graves, pérdida brusca de peso, orina oscura y concentrada, somnolencia, cefalea y fatiga extrema.

4. El agua y otras bebidas con diferentes sabores son necesarias para asegurar una adecuada hidratación. En situaciones de deshidratación leve, como las mencionadas anteriormente (puntos 2 y 3), las bebidas con sales minerales, en concreto sodio, y con azúcares de absorción rápida pueden facilitar una mejor rehidratación.

5. Es conveniente hidratarse antes, durante y después del ejercicio ya que cualquier ejercicio físico, aunque sea moderado, produce la eliminación de cierta cantidad de agua y sales minerales, además de un
consumo energético.

6. Además de los líquidos, ciertos alimentos, como frutas y verduras, nos pueden ayudar a mantener un buen nivel de hidratación.

7. Las comidas copiosas requieren un aporte suplementario de bebida.

8. Si realiza algún tipo de dieta pueden variar sus necesidades específicas de hidratación.

9. Las bebidas alcohólicas no evitan la deshidratación e incluso pueden llegar a empeorarla.

10. La utilización de forma habitual de ciertos medicamentos (diuréticos, por ejemplo) puede afectar el estado de hidratación.

Referencia:
– Documento de Consenso “Pautas de hidratación con bebidas con sales minerales” realizado por el Consejo General de Colegios Oficiales de Farmacéuticos.

GOLPE DE CALOR

Hoy volvemos a publicar este artículo pensando en los runners y demás deportistas que no descansan ni en verano. Os aconsejamos leerlo:

¿ES BUENO CORRER BAJO EL SOL?

El verano es una buena época para la práctica de actividades deportivas siempre adaptadas a las características individuales  de  cada persona según su edad, sexo, peso, nivel de condición física,  enfermedades que presente o la medicación que tome.

En condiciones normales, la piel, los vasos sanguíneos y el nivel de transpiración funcionan correctamente ante un aumento de temperatura provocado por el cuerpo, sin embargo el sistema de enfriamiento pueden fallar cuando se exponen a altas temperaturas por mucho tiempo, por lo que las consecuencias no se hacen esperar. Algunas consecuencias son:

  • Fuertes calambres.
  • Síncope de calor o colapso, es una sensación de desmayo.
  • Agotamiento.
  • Sensación de vomito.
  • Dolor de cabeza.
  • Debilidad.
  • Fuerte deshidratación.
  • Confusión.
  • Golpe de calor, es una situación de emergencia en la que necesitas atención médica, ya que se puede sufrir un desmayo.

¿QUÉ ES UN GOLPE DE CALOR?

El golpe de calor durante el esfuerzo aparece cuando el cuerpo del corredor ya no tiene la capacidad suficiente para enfriarse o bajar su temperatura. El riesgo de padecer un golpe de calor es importante cuando se reúnen ciertos factores: calor intenso, exposición importante al sol, viento y aire húmedo. Durante el esfuerzo de la carrera, el organismo se calienta, la fiebre no tarda en llegar y aparece una fuerte sensación de malestar que puede conducir rápidamente a la pérdida de conocimiento:

Los primeros síntomas que nota el corredor son múltiples:

– cansancio, mareos, náuseas y dolor de cabeza,

– enrojecimiento o palidez de la cara, y piel muy caliente y seca,

– escalofríos y sudores abundantes.

El corredor tiene mucha sed, y su esfuerzo se vuelve aleatorio e indeciso. Se vuelve inestable.

Si no hay una reacción de protección o de enfriamiento del organismo, el golpe de calor puede ser muy  grave. Es importante saber que una pérdida de conocimiento con convulsiones es indicio de una deshidratación severa y que modifica el funcionamiento del sistema nervioso central.

Los deportistas que duermen mal o están enfermos, cursando cuadros clínicos que incluyen vómitos, diarrea, o fiebre, son más propensos a padecer el golpe de calor. Lo mismo sucede con aquellos deportistas que toman diuréticos o alcohol.

Mucha gente opta por correr por las mañanas o por las tardes, poca gente lo realiza al medio día.

Si optas correr al medio día, es recomendable considerar lo siguiente:

  • Hidratarte a cada rato: no esperes a tener sed para hidratarte. La sensación de sed ya es la señal de una pérdida hídrica del 1 % que equivale a una merma del 10 % de las capacidades físicas. Si la actividad dura menos de una hora, con tomar agua fresca (unos 125 cc cada 15-20 minutos) es suficiente. En cambio, si se extiende más de 60 minutos, habrá que ingerir bebidas deportivas o isotónicas (500 cc unos 60 minutos antes de iniciar el ejercicio y entre 100-125 cc cada cuarto de hora durante la práctica del mismo). Para evaluar tu adecuada hidratación observa el color de tu orina, Cuanto más hidratado estés, más claro será el color de ella. Una orina de color amarillo oscuro nos indica  una alta concentración debido a la deshidratación.
  • Hidratarte mucho al finalizar la carrera  para recuperar el líquido perdido.
  • Para evitar una deshidratación precoz durante el esfuerzo: los días anteriores a la carrera o al entrenamiento, hay que evitar las comidas demasiado ricas, las bebidas alcohólicas y el café.
  • Utilizar una gorra.
  • Utilizar gafas de sol.
  • La ropa clara evita sufrir más el poder del calor, así como es preferible usar aquella que permita una adecuada transpiración.
  • Utilizar crema protectora contra el sol: La radiación causa irritación y quemaduras en la piel e incrementa de forma notable el riesgo de padecer cáncer de piel, es decir, el temido melanoma

CUIDADO CON LOS NIÑOS Y LAS PERSONAS MAYORES:

Los niños y las personas de edad avanzada deben tener un cuidado especial, pues su capacidad para el control de la temperatura  interna está alterada por la edad. Extremar las precauciones y, evidentemente, en olas de calor, no es recomendable realizar deportes que conlleven grandes esfuerzos.

EL TRATAMIENTO DEL GOLPE DE CALOR :

Emergencia médica:

En el tratamiento del golpe de calor cada minuto cuenta. Cuando la temperatura interna corporal es muy alta, las células corporales y las del cerebro comienzan a morir y por lo tanto enfriar rápidamente es crucial. Los signos iniciales son pequeños cambios que afectan al sistema nervioso central (SNC) -alteración en el razonamiento o conducta- y una temperatura corporal sobre 40- 40,6ºC). Cuando un deportista se desmaya, la mejor medición de temperatura corporal es la rectal; la temperatura oral, axilar, o la del canal auditivo no son buenos substitutos. Los signos de enfermedad avanzada son el desmayo con la piel húmeda, temperaturas internas sobre los 41-41,7ºC (y evidentes cambios en el SNC —delirio, letargo, convulsiones, o coma ).

CONSEJOS PARA DEPORTISTAS EN VERANO:

Además de la elevación de los termómetros, debemos tener en cuenta el grado de humedad relativa, ya que condiciona nuestra capacidad para mantener una adecuada temperatura interna y aumenta la deshidratación. Asimismo, la piel ha de estar bien protegida de los rayos solares a la hora de salir a correr o de cualquier tipo de actividad deportiva.

¿Conoces el índice WBGT?:

Para evitar el golpe de calor y la deshidratación, las federaciones deportivas han encontrado un buen medio para evaluar los riesgos antes de una prueba de running, gracias a una herramienta: el índice WBGT. Este aparato, que presenta la información en grados Celsius, tiene en cuenta varios factores ambientales: la presión atmosférica, el viento, la higrometría y la temperatura exterior. Si el índice da un valor de 28° a 30°, los corredores deben ir con cuidado y la organización debe poner a su disposición distintos medios a lo largo del recorrido: pausas más largas, recomendaciones por parte de los organizadores, bebidas disponibles… En cambio, si la escala del índice WBGT supera los 30° Celsius, la salida de la prueba se anula.

¿PODEMOS ACOSTUMBRARNOS A ENTRENAR CON TANTO CALOR?:

Jenny Hadfield, médica deportiva y corredora de maratones, asegura que los efectos de entrenar con calor son muy similares a hacerlo en altitud. La fatiga aumenta y el rendimiento disminuye, porque las células transportan menos oxígeno. Pero tras varios días, el organismo se va aclimatando y desarrollando sus propios mecanismos. Su respuesta a la escasez de oxígeno provocada por las altas temperaturas es elevar la producción natural de la hormona conocida como EPO (eritropoyetina endógena), incrementando así la cantidad de glóbulos rojos y cuyo resultado final se traduce en que se transporta una cantidad mayor de oxígeno a los músculos.

De esta manera, gracias al entrenamiento con calor se mejora la resistencia y se consigue mayor rendimiento físico, que se hace más patente cuando finaliza el verano y se vuelve a hacer ejercicio en condiciones climatológicas menos desfavorables.

Aconsejamos en estos casos ir controlados por un médico para evitar sustos.

En verano los músculos sufren menos:

Un motivo de peso por el que resulta aconsejable seguir entrenando en verano es que solo dos meses (julio y agosto) de inactividad bastan para perder la forma física conseguida durante el resto del año. Es cierto que cuesta vencer la pereza, pero quien lo logra tiene su recompensa. Por ejemplo, ¿sabías que al hacer ejercicio con calor se reduce el riesgo de sufrir lesiones musculares?

En invierno los músculos están más tensos por el frío. Por eso es necesario realizar ejercicios de calentamiento para ponerlos a tono y evitar las lesiones. En cambio en verano los músculos están más distendidos, con lo cual (aunque no conviene dejar de realizar estiramientos antes y después del ejercicio), el riesgo de sufrir una lesión al correr, se reduce en más del cincuenta por ciento.

Otra ventaja es que en los días estivales los corredores y los ciclistas pueden hacer pausas en su actividad deportiva sin miedo a que los músculos se enfríen.

En invierno, si nos paramos más de cinco minutos, conviene volver a calentar antes de proseguir el ejercicio. En cambio, en verano eso no es necesario, ya que los músculos no se enfrían. Y esto es una gran ventaja cuando se hace deporte al aire libre. Puedes estar corriendo, pararte a admirar el paisaje y volver a trotar sin tener que estirar de nuevo.

Adiós a la hinchazón:

Hacer ejercicio con regularidad en verano ayuda a reducir la hinchazón en tobillos, piernas, abdomen y cuello, que son las zonas donde más se acumulan los líquidos.

Pero correr o pedalear bajo el sol veraniego tiene aún más efectos positivos. Según un estudio realizado por la Universidad de California en Los Ángeles (UCLA) con corredores y ciclistas, los deportistas que entrenaban en el período estival tenían en la piel mayores niveles de vitamina D, que es muy importante para la mineralización de los huesos y favorece la absorción en el intestino del calcio y el fósforo. Aunque la mayoría de las vitaminas y minerales hay que tomarlos en los alimentos, en el caso de la vitamina D el metabolismo es capaz de fabricarla en la propia piel gracias a la interacción entre una enzima llamada 7-dehidrocolesterol y las radiaciones ultravioletas del sol.

El mismo estudio también demostró que los deportistas que entrenaban en verano tenían niveles de colesterol más bajos que los que descansaban en la temporada estival. Y nuevamente era debido al sol, ya que la luz ultravioleta ayuda a metabolizar estos lípidos.

RESUMIENDO…

Menos riesgo de lesiones, aumento del rendimiento, disminución de los niveles del colesterol. Hacer ejercicio en verano tiene sus ventajas. También sus riesgos, pero estos son fáciles de evitar con un poco de sentido común. Así que no hay excusa para quedarse sentado en el sofá.

PUNTOS CLAVE:

  • El golpe de calor es siempre un peligro en los deportes de verano, especialmente en carreras al aire libre y en el fútbol americano.
  • El golpe de calor lo causa comúnmente una combinación de ambiente caluroso, ejercicio extenuante, atuendo deportivo que limita la evaporación del sudor, una insuficiente adaptación al calor, demasiada grasa corporal, y/o carencia de buena forma física.
  • El diagnóstico temprano y el tratamiento rápido de un golpe de calor en desarrollo pueden salvar vidas.
  • La prevención del golpe de calor depende de la aclimatación, la hidratación, paso gradual, enfriamiento, y vigilancia.
  • El golpe de calor es una situación de emergencia médica. La fórmula para evitar la fatalidad es: enfriar primero y transportar al paciente después.

El golpe de calor puede avanzar rápidamente en corredores y los síntomas iniciales pueden ser sutiles e irreconocibles. El diagnóstico temprano y la terapia adecuada pueden salvar vidas, y el golpe de calor durante el esfuerzo debería ser del todo evitable.

Este artículo ha sido elaborado con información extraida de:

  • www.fuentesaludable.com
  • www.efesalud.com
  • www.quo.es
  • www.kalenji.es
  • www.gssweb.org
  • www.muyfitness.com
  • www.guiateca.com

 

 

 

 

 

¿DE QUÉ TE GUSTARIA HABLAR?

Después de más de 350 artículos, creemos que hemos hablado ya de muchas cosas…

Pero si tienes alguna duda sobre cualquier cosa o si tienes algo que te preocupe, puedes escribirnos a [email protected]

O si lo prefieres, rellena el siguiente formulario:

¡Estaremos encantados de ayudarte!

 

CAMINAR ES GRATIS

Caminar es una actividad simple y gratis, que se puede realizar solo o en compañía.

Es apto para todo el mundo, desde los que están más en forma hasta los más sedentarios. Se queman calorías y se pone en marcha el corazón.

Caminar a paso rápido dos horas y cuarto a la semana, supone añadir 2 años  a la esperanza de vida.

No deberíamos extrañarnos si en la próxima receta de nuestro médico, en vez de poner “reposo e ibuprofeno cada 8 horas”, indica “caminar a diario 20 minutos”.

Los beneficios de caminar son infinitos:

  • Resfriados y gripe: El ejercicio físico estimula la formación de glóbulos rojos (hematíes) y glóbulos blancos (leucocitos), los principales defensores de infecciones en nuestro organismo.  un estudio de Harvard, en el que participaron 1000 hombres y mujeres, los que caminaban 20 minutos al día durante 5 días a la semana padecían un 43% menos de resfriados y gripe, y si enfermaban la duración era mucho más corta.

  • Estrés: Ir a pasear produce un efecto ansiolítico. Caminar 15 minutos al día alivia la ansiedad y así puede frenar la ingesta de alimentos azucarados y chocolate a la cual recurren muchas personas en momentos de estrés.
  • Depresión: Caminar puede ser una actividad social y puede ayudar a personas con depresión. Produce endorfinas (las hormonas de la felicidad) que nos ayudan a sentirnos mejor. Media hora al día es suficiente para disminuir un 36% los síntomas de la depresión.

  • Artrosis: Andar refuerza la rodilla y las caderas, las articulaciones más afectadas por la artrosis. Algo muy recomendable en pacientes de cierta edad o con mucho peso.  Reforzamos el cuádriceps y por eso se reduce el dolor y se retrasa la evolución de la enfermedad.

  • Fracturas: 4  horas semanales reducen el riesgo de fractura de cadera hasta un 43%.
  • Alzheimer: Caminar reduce a la mitad el riesgo de padecer esta enfermedad durante  5 años. Caminar mejora el riego sanguíneo y hace que llegue más sangre al cerebro favoreciendo así el desarrollo de nuevas células cerebrales.

  • Cáncer: dedicarse a caminar deprisa entre 30 i 60 minutos diarios, 5 dias a la semana, reduce el riesgo de cáncer de mama un 40%.

  • Diabetes: 3.500 pasos diarios comportan un 29% de reducción del riesgo de diabetes.
  • Corazón: media hora diaria de caminata reduce el riesgo de enfermedad coronaria  un 19%.
  • Obesidad: una hora diaria, reduce el riesgo de obesidad al  50%.

  • Ictus: el ejercicio cardiovascular ayuda a controlar la presión arterial, que es una de les causas más habituales de ictus. 30 minutos diarios caminando rápido reducen el riesgo de ictus un 27%.

Este artículo ha sido elaborado con información extraida de:

  • www.lavanguardia.es
  • www.interesmutu.com

ASTENIA DEPORTIVA

Con la llegada del verano a muchas personas les apetece más salir a pasear, practicar deporte al aire libre, pero…no todo el mundo tiene fuerzas. Muchos deportistas se sienten cansados con la llegada del buen tiempo. Las elevadas temperaturas afectan al rendimiento deportivo y aumenta la sensación de fatiga. El deportista siente que ¡QUIERE PERO NO PUEDE!.

El término de astenia significa debilidad o falta de fuerza, pero  en Medicina de la Actividad Física y el Deporte lo consideramos como síndrome de fatiga del deportista.

Podemos encontrar estados de fatiga local cuando sólo se afecta a un músculo o grupo muscular, o general cuando repercute en todo el organismo. Ante la necesidad de definir este tipo de situaciones, de una forma general, hablamos de “fatiga cuando existe dificultad para mantener el nivel de fuerza esperado o requerido para realizar una tarea determinada ocasionando una disminución del rendimiento”.

Durante el verano, incrementa el consumo de frutas y verduras frescas, las cuales son excelentes fuentes de fibra, antioxidantes, vitaminas y minerales; pero aportan poca energía, carbohidratos complejos, proteínas y grasas.

Debido al desgaste incrementado de energía que tienen todos los deportistas, éstos necesitan aumentar el consumo de nutrientes, especialmente si padecen los síntomas de la astenia. La ingesta de micronutrientes con poder antioxidante debería ser mayor también,  ya que el ejercicio aumenta la producción de radicales libres con poder oxidante, lo cual aumenta la fatiga muscular.

Existen las vitaminas con poder antioxidante, indispensables en la dieta de un deportista: son las A, C, D y E.

La vitamina A es indispensable para el mantenimiento del metabolismo del hierro y sistema inmune normal.

La vitamina C es necesaria para mantenimiento de la función del sistema inmune durante y después de actividad física intensa, del sistema nervioso y del metabolismo energético, a proteger a las células de estrés oxidativo, a reducir el cansancio y fatiga, incrementar la absorción de hierro.

La vitamina D la obtenemos sobre todo a través de la exposición solar.

La vitamina E favorece a la protección celular contra estrés oxidativo.

Las vitaminas del grupo B, favorecen a la función normal del corazón, del sistema nervioso, metabolismo energético, metabolismo del hierro; a la reducción del cansancio y fatiga; a la síntesis de glóbulos rojos, membranas mucosas, tejidos, hormonas esteroideas y neurotransmisores; y nos protegen contra el estrés oxidativo. Las vitaminas del grupo B son fáciles de perder a través de la orina, por lo que las deficiencias son muy comunes.

Imprescindible es también mantener un adecuado nivel de hidratación siempre que practicamos deporte, y en verano, más aún. Si quieres consejos de hidratación, haz clic aquí.

También puedes ampliar información sobre la astenia consultando otro de nuestros artículos. Haz clic ¿ASTENIA EN EL DEPORTE… O DEPORTE PARA VENCERLA?.

Este artículo ha sido elaborado con información extraida de:

  • PROTOCOLO DIAGNÓSTICO DE LA ASTENIA EN EL DEPORTISTA F. Drobnic Martíneza , J.M. González de Susoa y A. Córdova Martínezb a Departamento de Fisiología del Deporte. CAR (Centro de Alto Rendimiento). Sant Cugat del Vallés. Barcelona. bDepartamento de Fisiología. Escuela Universitaria de Fisioterapia de Soria. Universidad de Valladolid. Equipo ciclista Kelme. Soria
  • www.cmdsport.com

BULIMIA Y DEPORTE. COMO SE INFLUYEN ENTRE ELLOS.

¿Qué es la bulimia nerviosa?

La bulimia nerviosa suele ser un trastorno oculto, fácilmente pasa desapercibido, y se vive con sentimientos de vergüenza y culpa. Por este motivo la persona afectada suele pedir ayuda cuando el problema ya está avanzado.

El tiempo medio de evolución de la enfermedad es de 4 años, cursando de forma episódica con gran influencia en las recaídas de los acontecimientos vitales estresantes.

El pronóstico es variable, la enfermedad puede durar mucho tiempo, con una evolución episódica y fluctuante asociada a los eventos estresantes de la vida.

La bulimia nerviosa afecta a entre el 0,4% y el 3% de la población joven española, especialmente a las chicas.

El perfil del paciente con bulimia nerviosa es una mujer, adolescente, con peso normal o sobrepeso y con baja autoestima. Tienen una preocupación excesiva por la alimentación, suelen tener ciclos de dietas extremas y ayuno a lo largo de su vida. No suelen comer en público y suelen hacer una actividad física irregular, al igual que la alimentación “en atracones”.

Los rasgos de personalidad más frecuentes son:

  • Muy perfeccionistas y con gran nivel de autoexigencia.
  • Negación del hambre
  • Inmadurez afectiva y en las relaciones de pareja.
  • Fuerte dependencia de su entorno
  • Aislamiento social

La bulimia nerviosa es un trastorno de la conducta alimentaria que se caracteriza por episodios de atracones (ingesta voraz e incontrolada), en los que se ingiere una gran cantidad de alimento en poco espacio de tiempo y generalmente en secreto. Las personas afectadas intentan compensar los efectos de las sobreingesta mediante vómitos autoinducidos, laxantes o aumento de la actividad física.

Muestran preocupación excesiva por el peso y la figura, pero no se producen necesariamente alteraciones en el peso, ya que tanto pueden presentar peso normal, como bajo peso o sobrepeso.

Para diagnosticar un TCA (bulimia, anorexia u otro transtorno de la conducta alimentaria) es indispensable que la persona que parece estar sufriendolo sea evaluada por distintos profesionales.

Entre un 25% y un 50% de los pacientes con bulimia nerviosa que son capaces de participar en el tratamiento adecuado se curan.

¿Qué señales pueden advertirnos de un posible TCA?:

En relación a la alimentación:

  • Utilización injustificada de dietas restrictivas 
  • Estado de preocupación constante por la comida 
  • Interés exagerado por recetas de cocina 
  • Sentimiento de culpa por haber comido 
  • Comportamiento alimentario extraño (velocidad ingesta, comer derecho, etc) 
  • Levantarse de la mesa y encerrarse en el baño después de cada comida 
  • Aumento de la frecuencia y cantidad de tiempo que está en el baño 
  • Evitar comidas en familia 
  • Rapidez con la que se acaba la comida de casa 
  • Encontrar comida escondida, por ejemplo, en su habitación 
  • Encontrar grandes cantidades de restos de comida, envoltorios, etc. en su habitación o en la basura. 

En relación al peso:

  • Pérdida de peso injustificada 
  • Miedo y rechazo exagerado al sobrepeso 
  • Práctica de ejercicio físico de forma compulsiva con el único objetivo de adelgazar
  • Práctica del vómito autoinducido 
  • Consumo de laxantes y diuréticos 
  • Amenorrea (desaparición del ciclo menstrual durante, como mínimo, 3 mesos consecutivos) si es mujer, como síntoma debido a la desnutrición
  • Otros síntomas físicos debidos a la desnutrición: frío en las manos y pies, sequedad de la piel, estreñimiento, palidez o mareos, caída de cabello, etc. 

En relación a la imagen corporal:

  • Percepción errónea de tener un cuerpo grueso
  • Intentos de esconder el cuerpo con ropa ancha, por ejemplo 

En relación al comportamiento:

  • Alteración del rendimiento académico o laboral 
  • Aislamiento progresivo 
  • Aumento de la irritabilidad y agresividad 
  • Aumento de los síntomas depresivos y/o la ansiedad 
  • Comportamientos manipulativos y aparición de mentiras

Se ha encontrado una relación entre excesivo ejercicio físico y trastornos de la conducta alimentaria (TCA):

Esta asociación ha sido el resultado de la presión social, pero también de los riesgos de algunos deportes específicos incluyendo la presión de los entrenadores y una mayor atención al cuerpo.

Las deportistas de alto rendimiento, bailarinas profesionales y modelos son de alto riesgo para desarrollar estos trastornos.

Si una deportista es diagnosticada de anorexia y/o bulimia, no deberíamos impedir de forma inmediata y absoluta toda su práctica deportiva, ya que puede conllevarle un estrés emocional adicional.

Está demostrado que el ejercicio reduce la ansiedad y sirve para socializar.

Además también es importante saber que el deporte, bien utilizado y bajo supervisión de un especialista, puede servir como herramienta para abordar trastornos de alimentación. Pero sólo será eficaz si las actividades se adaptan al caso de cada paciente.

Debemos cuidar al máximo el modelo a imitar: no sólo las deportistas delgadas y pequeñas alcanzan el éxito, también lo consiguen chicas musculosas y fuertes.

Resumiendo…:

  • El ejercicio físico, deportivo o recreativo, de los pacientes con TCA es algo más que un mecanismo para satisfacer el deseo de perder o controlar el peso.
  • Esta actividad física (excesiva) de los pacientes con TCA puede ser voluntaria y finalista (medio para conseguir la pérdida de peso), pero también puede llegar a ser ritualista, estereotipada y compulsiva.
  • No debe subestimarse la existencia de TCA por actividad física, sobre todo en aquellos casos asociados a la práctica deportiva.
  • Los programas terapéuticos no sólo deberían contemplar la reeducación nutricional, sino que también deberán tener presente la corrección del exceso de actividad física para reducir la influencia de la ingesta alimentaria y a suprimir su posible carácter compulsivo. En este sentido sería aconsejable la de un programa de actividad física supervisado, con realización de ejercicios físicos de intensidad y duración moderada, para obtener los beneficios metabólicos, cardiovasculares, respiratorios, psicológicos y de salud que dicha práctica auspicia, en lugar de intentar la supresión total de la actividad física, con lo que, además de aumentarle el estrés, convertiríamos a una persona hiperactiva, en sedentaria, con los consiguientes perjuicios que ello conllevaría.
  • Con relación a los familiares, la mejor forma de prevenir estos trastornos es en un ambiente familiar en donde se practique una alimentación saludable y equilibrada. También incentivar en los familiares un grado adecuado de conocimiento de los TCA, para su precoz detección.

Este artículo ha sido elaborado con información extraida de:

  • «Transtornos de la conducta alimentaria». Javier Alfonso Alofonseca.
  • www.laopinioncoruna.es
  • www.reme.uji.es
  • www.acab.org
  • www.entrenador.es
  • www.as.com

TRANSTORNOS DE LA CONDUCTA ALIMENTARIA Y DEPORTE

Todos hemos oído hablar de anorexia, bulimia y otros TAC (transtornos de la conducta alimentaria). Estos transtornos normalmente se corresponden con una visión inadecuada de las mismas personas que los padecen.

En algunos de ellos, la persona come muy poco porque se ve con exceso de peso.

En otras ocasiones, la persona come mucho y luego practica mucho ejercicio para contrarrestar el exceso de calorías ingeridas. En este caso muchas veces existe un estado emocional alterado.  (En el próximo artículo ampliaremos información sobre este tema).

Muchas veces se usa la práctica de actividad física también como reguladora del estado emocional. Hemos dicho en otros artículos que la práctica de ejercicio físico genera endorfinas, la «hormona de la felicidad».

Pero algo que es muy preocupante es que a veces es la exigencia de la práctica deportiva la que provoca estos TAC. Por eso es muy importante prestar atención a:

  • la presión del entrenador
  • las presiones de los compañeros de equipo
  • las exigencias de cada especialidad deportiva
  • las características psicológicas del deportista

Se recomienda encarecidamente a los entrenadores y a todo el entorno del deportista:

  • revisar los valores y actitudes personales
  • formarse en TCA
  • buscar asesoramiento de nutricionistas
  • vigilar los signos de alarma
  • que el deportista mantenga un peso realista, según su tipología corporal, edad, rendimiento y especialidad deportiva
  • prestar apoyo emocional si fuera necesario y favorecer la autoestima
  • si se descubre la existencia de un TAC, es necesario un trabajo multidisciplinar de distintos profesionales para solucionar el problema de la mejor manera posible

Este artículo ha sido elaborado con información extraida de:

«La Alimentación en la Actividad Física y el Deporte». Anna Bach-Faig, Laura Esquius de la Zarza. Ed: Ars Alimentaria.

 

DEPORTE Y ALCOHOL: SI O NO.

Se ha hablado mucho de que el alcohol reduce el riesgo a sufrir enfermedades coronarias, pero los beneficios son limitados y los inconvenientes son muy abundantes si sobrepasamos un consumo moderado.

El alcohol tiene acciones metabólicas, cardiovasculares, termorreguladoras y neuromusculares que pueden afectar a nuestro rendimiento en el ejercicio.

Los efectos negativos de las bebidas alcohólicas:

Organismos como la Organización Mundial de la Salud (OMS) y el Departamento de Salud de la Comisión Europea, así como la absoluta mayoría de la investigación científica a este respecto, son tajantes sobre los efectos negativos de las bebidas alcohólicas. Los enumeran así:

  • Es neurotóxico, es decir, su consumo inhibe o altera gravemente las funciones del sistema nervioso
  • Puede disminuir la respuesta inmunitaria del organismo
  • Provoca dependencia
  • Es perjudicial para el sistema vascular
  • Aumenta el riesgo a largo plazo de sufrir cardiopatías, enfermedades hepáticas y cáncer, incluso en consumo moderado de alcohol
  • Aumenta el riesgo de muerte prematura
  • Es diurético, aumenta caudal y cantidad de orina 

Influencia del alcohol en el rendimiento deportivo:

Cada vez hay más población que practica deporte, habiendo una gran variedad de motivos para la práctica deportiva.

Es muy probable que muchas de estas personas que se están iniciando en el deporte consuman alcohol, aunque sea de forma esporádica, y quizás se pregunten por qué no mejoran en sus respectivos deportes si están siguiendo a la perfección la dieta que les mandó. su nutricionista y los ejercicios recomendados por su entrenador, pues quizás las respuesta esté en el alcohol.

Efectos del alcohol sobre la capacidad de fuerza:

  • Disminuye la fuerza de agarre y la potencia en el salto vertical.

Efectos del alcohol sobre equilibrio y la precisión:

  • Incrementa los temblores en las manos.
  • Disminuye la estabilidad y la capacidad de mantenernos en equilibrio.
  • Afecta negativamente a las habilidades finas (como pueden ser la precisión o la coordinación ojo-mano).

Efectos del alcohol sobre la capacidad de resistencia y velocidad:

  • Acelera la llegada de la fatiga, sobre todo en ejercicios de alta intensidad.
  • Debido al efecto deshidratador del alcohol afecta al rendimiento en los deportes cíclicos, sobre todo en ambientes cálidos.
  • Por tanto, disminuye el rendimiento en todas las pruebas de deportes cíclicos.

Cómo afecta el alcohol al rendimiento de resistencia:

El alcohol afecta la capacidad de trabajo muscular y da lugar a una disminución en los niveles de rendimiento general,  perjudica la regulación de la temperatura durante el ejercicio e incrementa la aparición de fatiga durante el ejercicio de alta intensidad.

En muchos deportes la ingesta de alcohol no está reglamentada pero ésta puede influir en el rendimiento, la fuerza y la coordinación.

El alcohol disminuye la síntesis de proteínas

La ingestión aguda de alcohol disminuye la síntesis de proteínas musculares de una manera dependiente de la dosis y del tiempo.

Después de un entrenamiento de fuerza, y más con el objetivo de ganar masa muscular, es muy importante tener una adecuada síntesis de proteínas para facilitar la reparación y la hipertrofia.

¿De qué dependen los efectos del alcohol sobre el rendimiento?

Los efectos del alcohol sobre el rendimiento dependen de:

  • El tipo y la dosis de alcohol consumido.
  • La administración y los efectos agudos y crónicos.
  • Factores endógenos (propios) tales como la tolerancia y la tasa de eliminación del alcohol.
  • Factores exógenos, principalmente ambientales.
  • El tipo de ejercicio que realicemos.
  • El alcohol influye en el metabolismo de las grasas y los carbohidratos
  • El alcohol proporciona energía, en concreto 7 kcal por gramo, pero esta energía no es aprovechada por el músculo.
  • El alcohol dificulta el metabolismo de los carbohidratos y las grasas.
  • La ingestión aguda de alcohol reduce el glucógeno muscular y disminuye la captación de glucosa en los músculos.
  • También  inhibe la producción de glucosa hepática durante el ejercicio, lo que finalmente puede llevar a una hipoglucemia.

El efecto vasodilatador del alcohol:

El alcohol actúa como un vasodilatador periférico. Esto significa que aumenta la pérdida de fluido a través de la evaporación, lo cual agrava aún más la deshidratación que puede estar ya presente durante el ejercicio.

El alcohol actúa como diurético lo cual puede propiciar un cuadro de deshidratación durante la práctica deportiva, y debido a que su ingesta incrementa la pérdida de líquidos, también se produce una pérdida mayor de vitaminas y minerales esenciales para el adecuado desempeño deportivo como el potasio, magnesio, fósforo y calcio.

Por eso el consumo de alcohol disminuye la tolerancia de trabajo sobre todo en  temperaturas ambientales altas .

La peor mezcla posible: alcohol y bebidas energéticas:

Estas mezclas de bebidas disminuyen la recuperación de la frecuencia cardíaca después del ejercicio.

Algunos deportistas incluyen bebidas energéticas estimulantes con taurina para superar la resaca con alcohol de la noche anterior y esto puede llegar a ser contraproducente ya que puede ocasionar importantes riesgos para la salud y en especial de origen cardiaco: arritmias, taquicardias e incluso infartos.

Hay un estudio científico que avala que la cerveza después de correr es buena…

En 2008, el doctor Manuel Castillo, catedrático de Fisiología de la facultad de Medicina de la Universidad de Granada, publicó el estudio Idoneidad de la cerveza en la recuperación del metabolismo de los deportistas, que concluye que “la cerveza, ingerida en dosis moderadas por personas adultas sanas, es una bebida interesante y complementaria al agua para rehidratarse tras la práctica deportiva”.

En aquel estudio los participantes corrieron durante una hora, al 60% de su capacidad y a 35 grados de temperatura, y a continuación bebieron agua, en la cantidad deseada, para refrescarse. En una segunda sesión, a los deportistas se permitió beber dos latas de cerveza. Según Castillo, no se encontraron parámetros que desaconsejaran tomar la bebida alcohólica. Más bien al contrario, “la cerveza permitía recuperar las pérdidas hídricas por lo menos en la misma medida que el agua”.

En el segundo experimento, los sujetos de estudio no bebían solo dos latas de cerveza, sino también todo el agua que quisieran. Si lo que se afirma es que la cerveza es un buen hidratante, ¿por qué los sujetos del experimento no se hidrataron solo con cerveza?

Nos encontramos con 2 efectos positivos de la ingesta de cerveza tras el ejercicio que no tiene el agua (el sabor y la recuperación muscular) y 1 efecto negativo que tampoco presenta el agua (el alcohol). La solución es sencilla, pues las cervezas sin alcohol tienen la misma composición que la cerveza con alcohol excepto un nutriente: el alcohol. Por tanto, la rehidratación con cerveza sin alcohol va a ser mucho más eficiente que con la cerveza con alcohol o solo con agua.

Pero los beneficios para la salud son anecdóticos :

La cerveza, que ya era consumida por los egipcios, puede ser deliciosa y refrescante para muchos y, desde luego, parte indiscutible de nuestra cultura. Sin embargo, por más que interese a la industria cervecera, no es buena para la práctica de deporte, no ayuda a la recuperación después de una carrera y, como tampoco ocurre con las bebidas energéticas, no puede sustituir al agua o las bebidas elaboradas para ese fin.

Existe la creencia de que el alcohol nos ayuda a calentar cuando realizamos deportes en climas fríos (por ejemplo deportes de montaña). No es más que un mito, de hecho, el alcohol favorece el enfriamiento y aumenta el riesgo de hipotermia en este tipo de climas. Al sentir frío el organismo pone en marcha un sistema de defensa que consisten en estrechar los vasos sanguíneos para que la sangre circule más lenta y se concentra en el pecho y la cabeza (órganos vitales), de ahí que sintamos frío en las extremidades. El alcohol es un vasodilatador, va a ensanchar los vasos sanguíneos haciendo que la sangre fluya hacia las extremidades, provocando una falsa sensación de calor y aumentando así el riesgo de hipotermia.

Este artículo ha sido elaborado con información extraida de:

  • www.vitonica.com
  • www.entrenamiento.com
  • www.sportlife.es
  • www.saludmasdeporte.com

 

DEPORTE Y CONTAMINACION

Si solemos practicar nuestra actividad física deportiva en espacios exteriores hay una relación existente que, por desgracia, debemos tener en cuenta cada vez más en la actualidad, la contaminación y el ejercicio físico.

Con la falta de lluvias  aumenta la contaminación en nuestras ciudades. Se nota que el ambiente está cargado y es difícil respirar el aire que nos rodea, una situación que se hace difícil de llevar sobre todo si practicamos ejercicio.

Los perjuicios que produce en nuestro cuerpo respirar polución son muchos, especialmente si realizamos ejercicio en zonas contaminadas.

Contaminación y ejercicio: cómo valorar el grado de exposición a la contaminación del aire:

Generalmente, las mediciones de la calidad del aire se notifican como concentraciones medias diarias o anuales de partículas PM10 por metro cúbico (m3) de aire, se utiliza pues el PM 10 como indicador del grado de exposición a la contaminación. Las mediciones sistemáticas de la calidad del aire describen esas concentraciones de PM expresadas en microgramos (μ)/m3. Cuando se dispone de instrumentos de medición suficientemente sensibles, se notifican también las concentraciones de partículas finas (PM2,5 o más pequeñas).

El MP 10 representa la masa de las partículas que entran en el sistema respiratorio, además incluye tanto las partículas gruesas (de un tamaño comprendido entre 2,5 y 10 µ) como las finas (de menos de 2,5 MP) que se considera que contribuyen a los efectos en la salud observados en los entornos urbanos. Las primeras se forman básicamente por medio de procesos mecánicos, como las obras de construcción, la suspensión del polvo de los caminos o el viento, mientras que las segundas proceden sobre todo de fuentes de combustión.

Estos índices tienen en cuenta a los contaminantes más problemáticos de las grandes ciudades europeas en las que el dióxido de nitrógeno (NO2), el ozono (O3) y las partículas (PM) encabezan la lista.

La OMS elabora directrices sobre la calidad del aire en las que recomienda límites máximos de exposición a los principales contaminantes del aire.

El aire está formado por oxígeno, dióxido de carbono y otro tipo de partículas que están en suspensión en la atmósfera, como pueden ser el polvo, el polen… Cuando hay un exceso de contaminación la calidad del aire disminuye, pues las concentraciones de toxinas y metales pesados derivados de la combustión son mayores.

Cuando realizamos deporte consumimos un 20% más de aire que de costumbre. Es por esto que el efecto nocivo de estas sustancias se multiplica y con ello la formación de radicales libres que afectan a nuestra salud.

El sistema respiratorio y el sistema cardiovascular serán los principales afectados. Este proceso puede derivar en enfermedades como bronquitis crónica, edema pulmonar, cáncer…

Con la contaminación nuestra circulación se ralentiza y no es tan fluida como debería. Esto puede causar trastornos en nuestro sistema cardiovascular como mala circulación, debilidad de las arterias y del corazón, pudiendo sufrir a largo plazo infarto o cualquier otro tipo de enfermedad cardiaca.

Contaminación y ejercicio: síntomas o complicaciones:

La contaminación del aire con gases nocivos es un factor que ejerce una influencia desfavorable sobre el organismo provocando una disminución de trabajo hasta el punto de concluir en enfermedades. A nivel internacional, la comunidad científica coincide en que ejercitarse bajo esta condición no solo puede disminuir el rendimiento, sino que hace más vulnerable al runner a los contaminantes presentes en la atmósfera. Por ejemplo, el monóxido de carbono (CO) entra rápidamente a la sangre ocupando el lugar del oxígeno en la molécula de hemoglobina, disminuyendo la cantidad de oxígeno que llega a los tejidos. A su vez, el ozono que aparece en la atmósfera puede llegar a irritar los ojos, provocar falta de aliento, tos, náuseas, rigidez en el pecho, afectando el entrenamiento. El dióxido de azufre es un irritante del conducto respiratorio superior, de los bronquios, etc.

Cuando juntamos contaminación y ejercicio, nos arriesgamos a tener efectos perjudiciales para la salud, especialmente si existen problemas previos de asma o alguna enfermedad pulmonar crónica, enfermedades cardiovasculares o diabetes. Los efectos negativos de respirar el aire de una zona con alta contaminación atmosférica se acentúan mucho durante la actividad física aeróbica, incluso si es de baja intensidad. Esto ocurre porque en estos casos respiramos unas diez veces más aire que cuando estamos en reposo.

Los síntomas que producen los altos índices de contaminación en la población, fundamentalmente en los deportistas, depende del contaminante, pero en general los más comunes son: tos irritativa, tos productiva, sensación de ahogo, nauseas, cefalea, conjuntivitis, laringitis, rinitis….

Un estudio científico realizado en Barcelona muestra que las partículas nocivas en el aire de la ciudad podrían menguar los beneficios del deporte

Más de la mitad de la población mundial respira aire contaminado, según la Organización Mundial de la Salud, y en España más de 30 ciudades incumplen los niveles recomendados de contaminación atmosférica.

Cuando practicamos deporte inhalamos más cantidad de aire y entran en  nuestro organismo más sustancias nocivas que pueden llegar al sistema respiratorio.

Aunque practicar deporte en la ciudad es mejor que no practicar deporte, sí que se ha demostrado que la exposición a niveles altos de contaminación atmosférica reduce los beneficios de la actividad física. Estas han sido las conclusiones de un estudio del Instituto de Salud Global (ISGlobal), que ha analizado la relación entre la función pulmonar y la práctica de deporte en la ciudad, en medio de la polución del tráfico.

El estudio, que ha publicado la revista “Environment International”, ha analizado qué efectos tiene para la salud la práctica de ejercicio físico en la ciudad, bajo la exposición a la contaminación atmosférica provocada por el tráfico de coches y ha concluido que respirar contaminación antes y durante la actividad física reduce los beneficios de ésta para la salud.

El estudio, que forma parte del proyecto europeo EXPOsOMICS, se ha realizado en Barcelona con 30 personas sanas, a las que han hecho un seguimiento individual durante cuatro días en diferentes escenarios de exposición a la contaminación atmosférica.

Los resultados muestran que la exposición a niveles elevados de contaminación atenuó los beneficios respiratorios derivados del ejercicio, ya que las personas experimentaron una disminución a corto plazo en la función de las vías respiratorias altas y bajas, independientemente del nivel de actividad física que habían practicado.

“Hay 339.000 muertes prematuras al año en la Europa de los 28 por contaminación. Es una cuestión de salud pública, nos recorta la vida nueve meses”, explica Xavier Querol, científico del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC). “En la atmósfera hay dos tipos de contaminantes, los primarios -provocados por las chimeneas, los tubos de escape, las calderas o el dióxido de nitrógeno-, que afectan alrededor de la zona donde se emiten. Y los secundarios, que son los que se forman en la atmósfera a partir de otros contaminantes”.

El ozono es una sustancia cuya molécula está formada por tres átomos de oxígeno (O3) -cuando el oxígeno normal tiene dos (O2)-, lo que significa que contiene una sobredosis. Por tanto, si el oxígeno oxida, el ozono lo hace con mucha más intensidad. “Diferenciamos entre ozono bueno y malo. El bueno está en las altas capas de la atmósfera que sirve de filtro de los rayos ultravioletas, si no existiera ese filtro la vida en la tierra sería imposible. Nos achicharraríamos”, añade García Vicente. El ozono malo, continúa, está en el sobresuelo, en la troposfera, y es un oxidante muy fuerte que actúa sobre todo lo que encuentra. “Las personas, los animales, las cosechas y la vegetación en general, e incluso edificios o los monumentos”.

El ozono es un contaminante secundario que se forma por la acción de la luz solar sobre los contaminantes de dióxido de nitrógeno e hidrocarbono en el aire. Por tanto, los niveles más altos de ozono se van a encontrar entre el medio día o el atardecer. Si sale a ejercitarse a esas horas en zonas urbanas, su organismo estará más expuesto al efecto nocivo de este agente contaminante mejor salir a realizar la actividad en las primeras horas de la mañana o las últimas de la noche.

«Al hacer ejercicio en un parque en las horas de sol, la exposición al ozono es más alta que si estás en el centro de la ciudad. El ejercicio físico demanda más oxigeno, lo que conlleva un aumento de la frecuencia respiratoria y, por tanto, al respirar más se inhala más cantidad de ozono con su correspondiente efecto en la salud», explica Julio Díaz, jefe del Departamento de Epidemiología de la Escuela Nacional de Sanidad. “Es muy peligroso. Afecta tanto a nivel respiratorio como a nivel cardiovascular, ya que se cierran arterias y se aumenta la tensión arterial. También puede favorecer a la aparición de ictus e incluso puede provocar problemas reproductivos. Según los estudios publicados hasta el momento, hay una mortalidad anual de 500 personas al año en toda España atribuibles al ozono”, advierte Díaz. Y añade: “Si seguimos con estos niveles que tenemos, con el cambio climático, además, cada vez va a hacer más calor y más situaciones de estancamiento, por tanto, va a ir a peor. El ozono no va a bajar, es un contaminante que no tiene tendencia decreciente actualmente”.

Estudios recientes realizados en toda España por el equipo de Julio Díaz han encontrado la existencia de un valor umbral, que varía de una ciudad a otra, a partir del cual aumenta la mortalidad atribuible al ozono. La existencia de este umbral puede ser clave para la activación de los planes de prevención ante elevadas concentraciones de ozono. «Se actuaría igual que ocurre con las temperaturas en olas de calor. El activar una alerta basándose en impactos en salud propia de cada lugar, y no en la legislación, supondría un salto cualitativo importante en cuanto a las estrategias para minimizar los efectos de la contaminación en la salud»

La OMS estima en 1.800 los fallecimientos prematuros anuales en España producidos por la exposición a niveles de ozono como los registrados en buena parte de España. Según Ecologistas en Acción, se ha incumplido el valor objetivo legal para la protección de la salud establecido para el ozono troposférico, repartidas entre las comunidades autónomas de Andalucía, Aragón, Baleares, Castilla-La Mancha, Castilla y León, Cataluña, Comunidad Valenciana, Extremadura, Madrid, Murcia, Navarra y País Vasco, con 21,4 millones de habitantes afectados, casi la mitad de la población española.

Conclusiones sobre contaminación y ejercicio físico:

La Sociedad Española de Medicina del Deporte informa de las recomendaciones que deben tomar los deportistas que vayan a realizar actividad física en ambientes contaminados:

  1. Informarse de los niveles de contaminación atmosférica que las autoridades municipales deben dar a conocer públicamente.
  2. Abstenerse de practicar actividad física al aire libre en situaciones de contaminación atmosférica elevada.
  3. Si la contaminación atmosférica no es excesiva, se recomienda adoptar las siguientes medidas de protección:
  • Realizar la actividad física en las horas de menor contaminación, generalmente en las primeras horas del día.
  • Realizar la actividad física en lugares con la menor contaminación posible, como espacios verdes, espacios sin circulación de vehículos, espacios cerrados, etc.
  • El trayecto desde el lugar en el que se sale a realizar ejercicio físico (por ejemplo, domicilio) hasta el lugar donde se realiza, no debe utilizarse para realizar ejercicio.
  • Si se realiza ejercicio físico junto a carreteras, hacerlo lo más alejado posible de las mismas (a más de 15 metros es lo ideal).
  • No realizar ejercicio físico en situaciones de enfermedad(catarro, proceso febril, etc.).
  • Reducir la intensidad y duración del ejercicio físico disminuye la cantidad de partículas contaminantes que se inhalan a través de la respiración, por ello el entrenamiento al aire libre en días de mucha contaminación debe ser de menor intensidad y duración, completando algunas de sus partes en ambiente cerrado.
  • Utilizar un elemento protector en las vías aéreas (las prendas sólo evitan la entrada de humo; las mascarillas medicinales son más protectoras).
  • Los pacientes con enfermedades crónicas respiratorias y cardiocirculatorias deben extremar las precauciones y evitar el ejercicio físico al aire libre con niveles menores de contaminación atmosférica que los individuos sanos.

No obstante, los beneficios de la práctica regular de actividad física en situaciones de contaminación atmosférica parecen ser mayores que los riesgos de practicarla, por lo que se recomienda seguir practicando ejercicio físico, aún en ambiente contaminado, con las medidas anteriormente indicadas.

No es adecuado para nadie realizar actividades outdoor con niveles de emergencia. Cuando se combinan altas concentraciones de contaminación, elevada humedad, baja temperatura, la población de mayor riesgo no debe realizar actividad física. Con niveles de preemergencia no deben realizar actividad física los menores de 12 años.

El uso de mascarillas puede ayudar en algo pero es preferible los días con mayor contaminación realizar actividades indoor en lugares bien ventilados. De preferencia efectuar ejercicios anaeróbicos, es decir, de mayor intensidad que volumen.

Es recomendable no practicar deporte al aire libre durante las horas del día, ya que la contaminación es mayor por la gran afluencia de vehículos. Si no nos queda más remedio lo ideal es llevar a cabo la actividad en un parque o zona verde donde el aire esté depurado por los árboles. En los parques normalmente la concentración de oxígeno es mayor que en el resto de los lugares.

Lo que sí es cierto que los momentos ideales para realizar el ejercicio son al amanecer y por la noche, pues los niveles de contaminación han disminuido considerablemente, aunque si tenemos la posibilidad lo mejor es alejarnos de la ciudad y realizar la actividad deportiva en pleno campo, pues nuestra salud nos lo agradecerá.

Este artículo ha sido elaborado con información extraida de:

  • www.efefuturo.com
  • www.vitonica.com
  • www.elpais.com
  • www.mundoentrenamiento.com
  • www.abc.es
  • www.lavanguardia.com

DEPORTE Y ASMA

La Organización Mundial de la Salud (OMS) define el asma como “una enfermedad crónica que se caracteriza por ataques recurrentes de disnea (falta de aire) y sibilancias (pitidos en el pecho)”.

Los síntomas del asma son conocidos internacionalmente por todo el mundo: sensación de ahogo, falta de aire, asfixia…

Durante un ataque de asma, el revestimiento de los bronquios se inflama, lo que provoca un estrechamiento de las vías respiratorias y una disminución del flujo de aire que entra y sale de los pulmones.

Esto se produce cuando las vías respiratorias se inflaman y reaccionan ante agentes externos como el polen, el humo, el polvo, etc.

Actualmente afecta a unos 235 millones de personas en todo el mundo.

 

Asma y deporte, compatibles al 100%:

La práctica del deporte y el asma no son incompatibles, sino más bien todo lo contrario.

Una de las prácticas deportivas más recomendables para quienes sufren de asma es la natación.

La natación es uno de los mejores deportes para los asmáticos, porque no provoca excesiva presión pectoral y se practica en ambiente húmedo.

El ejemplo más claro es el del exnadador estadounidense Mark Spitz, quién, a pesar de ser asmático, consiguió siete medallas de oro en los Juegos Olímpicos de Múnich 1972.

Generalmente, nadar es mejor que correr. Efectivamente, la natación es uno de los mejores deportes para los asmáticos, porque no provoca excesiva presión pectoral y se practica en ambiente húmedo

Hay algunos deportes que plantean más retos a la gente con asma. Aquí se incluyen los deportes de resistencia, como las carreras y el ciclismo de largo recorrido, que exigen gastar mucha energía sin disponer de largos períodos de tiempo para descansar (lo que ocurre en el fútbol y el baloncesto). Los deportes de invierno, como el esquí de fondo y el hockey sobre hielo, también pueden plantear dificultades.

Practicar deporte mejora la resistencia respiratoria y mejora la tolerancia a la actividad física, siendo así un aspecto importante para llevar un estilo de vida saludable. “El deporte tiene beneficios para la salud respiratoria en diversos ámbitos”.

La Sociedad Española de Alergología e Inmunología Clínica (SEAIC), por su parte, destaca los siguientes beneficios de la actividad física en niños que padecen asma:

  • Mejora el desarrollo general del niño, dado el beneficio psicoemocional e integrador del deporte.
  • Se reducen las crisis asmáticas derivadas del esfuerzo.
  • Disminuye el nerviosismo ocasionado por las crisis.
  • Mejora la condición física y la propia tolerancia: el desarrollo de la musculatura respiratoria permite un incremento de la capacidad pulmonar.
  • Ayuda a mantener un peso saludable: cuando existe sobrepeso las complicaciones se duplican.

Es muy importante conocer y evitar los factores que incrementan las crisis asmáticas (humo, tabaco, polvo…). Seguir las indicaciones diarias del tratamiento, asegurarse de llevar siempre la medicación de rescate y acudir a una revisión anual también se posicionan como prácticas indispensables para mantener el asma bajo control.

Por otro lado, existe también el asma inducida por el esfuerzo y deporte:

Se debe sospechar asma de esfuerzo ante la presencia de tos, disnea u opresión torácica después de iniciar el ejercicio en toda persona con historia clínica de asma, atopia o rinitis, o con diagnóstico previo de hiperreactividad bronquial. El diagnóstico diferencial debe hacerse respecto a las enfermedades que producen disnea de diversa etiología, como las de origen cardíaco, metabólico, hematológico u otorrinolaringológico.

Asma inducido por ejercicio físico:

El asma inducido por ejercicio aparece muchas veces sin que los pacientes hayan desarrollado síntomas previamente. Tiene una prevalencia cada vez más alta, de entre un 15 y el 40% de pacientes menores de 40 años.

Cómo diagnosticarlo el asma inducido:

Se trata de una obstrucción reversible y aguda de las vías respiratorias, y los síntomas son similares a los del asma bronquial: tos, disnea y pitos cuando se practica ejercicio. Por eso, para calibrar la existencia de este tipo de asma, se realiza un test consistente en someter a la persona una carrera de seis minutos para, a partir de que alcance una frecuencia cardiaca suficiente, someterlo a espirometrías a los cinco, diez, quince y veinte minutos. Se resuelve de forma espontánea a partir de los 20 minutos y algunos pacientes (de un 30 a un 60%) pueden experimentar una reacción tardía de broncoconstricción entre las 4 y 12 horas posteriores al esfuerzo.

La solución no es suprimir el ejercicio físico.

El asma ha limitado tradicionalmente la práctica del ejercicio físico, especialmente a edades tempranas. Sin embargo, hoy los expertos creen que la práctica del deporte eleva el umbral de crisis del asma. Asma y deporte no tienen por qué ser una mala combinación. La solución no pasa por suprimir el ejercicio físico sino por adaptarlo a las circunstancias de cada persona.

Asma y deporte: consejos de una alergóloga:

Si sufres de asma inducido por el ejercicio, aquí te ofrecemos algunos consejos de Rocío Gámez para continuar practicando deporte:

1.- Adapta el tipo de deporte en función de la temporada: si eres alérgico al polen, no es recomendable que practiques deporte al aire libre en primavera, pero sí la natación.

2.- Elige bien tu deporte y practícalo en las mejores condiciones posibles. El 90% de los pacientes asmáticos practica natación porque refuerza la musculatura bronquial, pero deben tener cuidado al hacer carreras cortas porque supone un sobreesfuerzo por la inhalación de aire frío,

3.- La natación está especialmente indicada para aquellos a quienes se les diagnostica un asma por esfuerzo, porque se realiza en condiciones cálidas y húmedas, y las crisis de asma de esfuerzo se deben a una pérdida de calor y humedad de las vías respiratorias. Sin embargo, es cierto que el sujeto se expone a inhalar cloro, que es irritante. Para evitarlo, debes vigilar la concentración de cloro en el agua, controlar el tiempo de exposición y observar la reacción.

4.- Nunca debes llegar a un ejercicio extenuante y debes parar inmediatamente si sufres una crisis aguda. En condiciones normales, cualquier paciente estable puede hacerlo salvo si tiene una crisis aguda, lo que obliga a interrumpir y recuperarse.

5.- Planifica cuándo vas a hacer deporte y toma medidas preventivas si es necesario: En el caso de asma inducida por ejercicio el paciente tiene que utilizar su medicación preventiva veinte minutos antes, pero sólo si realmente lo necesitan porque si no te puedes habituar.

6.- Los especialistas aconsejan realizar un calentamiento adecuado antes del ejercicio, iniciándolo de manera suave y progresiva hasta alcanzar la intensidad perseguida.

7.- Aprende a respirar correctamente. Uno de los desencadenantes del asma es el aire frío inhalado.

Es muy importante respirar adecuadamente ya que la nariz ejerza su función de calentar, humidificar y filtrar de partículas el aire que respiramos.

La respiración es la función prioritaria y vital para la supervivencia de todo ser vivo, y también para nuestro rendimiento deportivo. Respiramos unas 25.000 veces al día, en un proceso que tiene dos etapas: la inspiración del oxigeno y la espiración del dióxido de carbono.

Pueden existir varias formas de inspirar y espirar y distintas combinaciones entre ellas:

  • Nasal
  • Bucal
  • Naso-bucal
  • Buco-bucal
  • Naso-nasal

La importancia de inspirar por la nariz:

Cuando el aire penetra por la nariz es filtrado por sus vellosidades, en la que es la primera barrera fisiológica contra las bacterias y cuerpos extraños. Entonces, el aire entra en las fosas nasales, donde se calentará, humidificará y filtrará por segunda vez.

El inspirar por la nariz tiene un efecto termorregulador del cerebro, controla el pH, regula reacciones endocrinas y metabólicas, y regula el sueño y la vigilia. Además, el aire se enriquece por óxido nítrico, que favorece la fijación del oxigeno en los glóbulos rojos. Si se inspira por la boca se pierden todas estas posibilidades para el equilibrio corporal.

Cómo se transforma el oxígeno en energía:

Tras la inspiración, el oxígeno inspirado desciende por la faringe, la laringe y la tráquea, y se introduce en los bronquios y los bronquiolos hasta llegar a los pulmones. Éstos son órganos elásticos y esponjosos que están formados por varios lóbulos, y se encuentran rodeados por una membrana que se llama pleura.

Los intercambios de los gases se efectúan a nivel de los alveolos pulmonares, a través de los vasos sanguíneos. Un adulto tiene unos 750 millones de alveolos que equivalen a una superficie de 150m². El oxígeno que se inspira alcanza los alveolos pulmonares cuya pared esta muy vascularizada y se produce la hematosis (oxigenación de la sangre).

Después, el oxígeno se transporta vía sanguínea en parte gracias al hierro de la proteína hemoglobina que está en los glóbulos rojos para llegar finalmente al músculo, a nivel de las mitocondrias. Allí, la glucosa o los lípidos se metabolizan para producir la energía necesaria a la contracción muscular.

Existen tres causas que hacen que el músculo no reciba suficiente energía para un buen rendimiento:

  • La forma de respirar (es muy importante respirar siempre por la nariz)
  • El asma de esfuerzo, que reduce el calibre del bronquio durante el esfuerzo
  • La carencia de hierro

El dióxido de carbono pasa de la sangre a los alveolos para ser eliminado en la fase de la espiración.

Respiración torácica vs respiración abdominal:

Es mucho mejor la respiración abdominal.

Los pulmones siguen el descenso del diafragma en dirección de la cavidad abdominal y en consecuencia el abdomen se dilata. Como la respiración abdominal implica a menos músculos, este tipo de respiración es menos cansada y se utiliza automáticamente cuando estamos relajados.

La respiración abdominal consciente puede ser particularmente interesante en actividades físicas y también en las intelectuales, porque queda más energía disponible para el resto del cuerpo.

La respiración durante el ejercicio:

En situación de reposo respiramos entre 12 a 15 veces por minuto y en cada respiración se moviliza más o menos medio litro de aire. Es decir, cada minuto movilizamos entre 6 y 7,5 litros de aire. Durante la práctica deportiva se tiene tendencia a mantener la concentración más sobre el esfuerzo que sobre la respiración.

La respiración aumenta para permitir que haya más oxígeno en el organismo y para que, de esta forma, se incremente la producción de energía indispensable para realizar un ejercicio físico.

En situación de ejercicio muy intensa, la frecuencia respiratoria puede llegar a 40-50 respiraciones por minuto y el volumen movilizado en cada respiración se sitúa alrededor de 3-4 litros. En la intensidad máxima de ejercicio se movilizan entre 120 y 200 litros por minuto. Estos valores varían lógicamente en función de la talla corporal y de las características individuales.

Efectos de una respiración incorrecta:

Los efectos de una respiración incorrecta son el ahogo y también enrojecimiento de la cara. Cuando un deportista se ahoga es consecuencia de un aumento de la concentración de CO². Es muy importante expirar prolongadamente y no bloquear la respiración. La espiración debería ser dos veces más larga que la inspiración. La glucosa se transforma en acido láctico ya que no hay suficiente oxigeno. El músculo se acidifica, se vuelve rígido y sus contracciones se alteran, por lo que pueden producirse calambres o contracturas o incluso desgarros musculares.

Durante el deporte, las zonas del cerebro que controlan la respiración están estimuladas por varios factores:

  • Informaciones de los receptores de los músculos y los tendones.
  • Aumento de la concentración del CO² en la sangre y la disminución de la de oxigeno.
  • El aumento de la tasa de adrenalina.

Al inicio del ejercicio hay que concentrarse en la inspiración. Relajar el abdomen y poco a poco hincharlo como un globo. En este momento el diafragma se abre y se absorbe una gran cantidad de oxígeno. En la espiración, se contrae el abdomen lo máximo posible y el diafragma asciende y vacía los pulmones.

Cada deporte requiere un tipo de respiración:

En corredores de fondo, marcha, footing o natación, la respiración debe ser regular, no forzada y rítmica. En general, la espiración debe ser más larga que la inspiración. No se deben hacer dobles espiraciones.

Según el ritmo del ejercicio debemos encontrar el ritmo respiratorio. Son actividades cardiovasculares y la respiración debe tener una cadencia para que se produzca una oxigenación máxima y evitar los calambres.

En carreras rápidas, las pocas respiraciones deben recuperarse después con inspiración nasal-abdominal e espiración nasal para recuperar al máximo la falta de oxigeno.

En la musculación se espira en el momento del esfuerzo, es decir, en el momento en el que se levantan los pesos o los elásticos. Se inspira en la fase de relajación y de recuperación.

Flato: ¿por qué se produce?:

A veces durante el ejercicio puede producirse la aparición de flato, que se debe a la falta de oxígeno del diafragma en personas que están poco habituadas a una intensidad de entrenamiento excesiva. Esta falta de oxígeno está provocada a su vez por una espiración insuficiente. El diafragma se irriga en el momento de la espiración, y, si esta se hace corta, la cantidad de sangre en la irrigación es menor.

Otro factor que puede provocar la aparición de flato es porque se haga ejercicio después de una comida, ya que la digestión necesita una gran cantidad de oxígeno y no hay suficiente para la irrigación del diafragma.

Resumen de conceptos prácticos respecto al asma inducida por el ejercicio y en el deporte y su nivel de evidencia:

  • La crisis de asma inducida por el esfuerzo (AIE) ocurre después del ejercicio.
  • El ejercicio provocador de AIE debe ser intenso y duradero.
  • La crisis de asma de esfuerzo puede ocurrir durante el ejercicio submáximo si es sostenido, sobre todo en niños.
  • La crisis de asma de esfuerzo se debe a una pérdida de calor y humedad de las vías respiratorias. La evitación de esta pérdida eleva el umbral de crisis.
  • La única prueba que confirma el asma de esfuerzo es la presencia de los signos y síntomas de asma y la disminución del FEV1después de un ejercicio. Cualquier otra prueba expresa una hiperreactividad bronquial que sirve para apoyar una historia clínica orientativa, ya sea con manitol, metacolina o suero salino hipertónico.
  • La mejor prevención del asma de esfuerzo es cuidar y tratar bien el asma.
  • La crisis de asma de esfuerzo se previene en gran medida haciendo un buen calentamiento y tomando medicación preventiva.
  • La medicación preventiva por excelencia son los broncodilatadores beta agonistas.
  • La práctica deportiva beneficia la funcionalidad del sistema respiratorio, también en el asmático.
  • La práctica deportiva eleva el umbral de crisis del asma de esfuerzo en el niño.
  • La práctica deportiva, sin duda con un buen cuidado del asma, disminuye el absentismo escolar por asma.
  • El deporte ideal para el niño con asma es el que le guste.
  • El deporte ideal para evitar la crisis de asma de esfuerzo es la natación.
  • La natación no hace asmático al que no lo es, ni empeora al que lo es, salvo que no esté bien cuidado.
  • Muchos niños con asma, pudiendo desarrollar asma de esfuerzo, demuestran disnea en el ejercicio debido a un nivel de condición física bajo. Se debe evaluar para evitar un tratamiento adicional que nunca será efectivo.
  • El asma es una enfermedad de riesgo y debe tenerse en cuenta en sujetos que van a hacer actividades lúdicas y deportivas en que una crisis puede poner en peligro su vida o la de otros.
Algunas estrategias de entrenamiento a tu plan de acción contra el asma. Entre ellas, pueden figurar las siguientes:

  • ·         saltarte los entrenamientos al aire libre cuando los índices de polen o de moho sean altos
  • ·         llevar bufanda o pasamontañas cuando entrenes en exteriores en invierno
  • ·         respirar por la nariz en vez de hacerlo por la boca mientras haces ejercicio
  • ·         dedicar suficiente tiempo a unos buenos ejercicios de calentamiento y de enfriamiento

La medicación del asma y el dopaje:

Consulta nuestros artículos sobre HABLEMOS DE DOPPING…1ª PARTE  y  HABLEMOS DE DOPPING…2ª PARTE para conocer más sobre este tema.

Este artículo ha sido elaborado con información extraida de:

  • www.farmarunning.com
  • www.es.gsk.es
  • www.sepacontenidos.es
  • www.kidshealth.org
  • www.saludmasdeporte.com